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Propiedades medicinales del té y sus principios activos
Fotografía de planta del té
(Camellia sinensis).
LOS MINERALES DEL TÉ
La coloración amarillo – verdosa que presentan todas las infusiones de té es debida en parte a su contenido en minerales, como el magnesio, potasio, calcio, manganeso y flúor. Estos componentes de dan además de coloración amarillenta, propiedades diuréticas, alcalinizantes y beneficiosas al organismo.
Por ejemplo, estudios señalan que el consumo de té está asociado a menor riesgo de caries dental debido a los fluoratos y a las propiedades antibacterianas de los taninos.
LA CAFEÍNA Y LOS ALCALOIDES DEL TÉ
La cafeína del té, es una base xántica (un alcaloide derivado de una purina), que le confiere a la bebida parte de su sabor, por lo que un té “desteinado”, puede resultar más suave. Además, aporta su efecto estimulante, que es directamente proporcional a su contenido relativo, que suele oscilar entre el 2-5%.
En menor cantidad que la cafeína, el té también contiene teobromina y teofilina, otros tipos de alcaloides también estimulantes del sistema nervioso.
El té negro es el más rico en cafeína (55 mg. por taza), debido a que ha pasado por un proceso de pseudo-fermentación durante el que ha liberado sus taninos y cafeína. El té semifermentado le sigue como el segundo más rico en cafeína (30 mg. por taza), mientras que el té verde y el té rojo tienen niveles intermedios (20 – 25 mg. por taza). El té blanco es el más pobre en cafeína (15 mg. por taza).
Diferencia del contenido medio en cafeína de los diferentes tipos de tés:
CONTENIDO EN CAFEÍNA DE CADA TIPO DE TÉ POR TAZA DE INFUSIÓN
POLIFENOLES, FLAVONOIDES Y PIGMENTOS DEL TÉ
La infusión de té solo contiene trazas de los pigmentos de la hoja, como la clorofila (especialmente en tés como el Gyokuro y en el té Pai Mu Tan).
La coloración amarilla de las infusiones de té también se deben a su contenido en flavonoides, en concreto las catequinas y los taninos:
Las catequinas confieren a la infusión propiedades astringentes y antioxidantes, de sabor amargo y coloración oscura. Estas catequinas se ven afectadas y disminuidas, por la fermentación de la elaboración de algunas clases de tés. Por ejemplo, en el proceso de oxidación completa que sufre el té negro, estos componentes degradan en teaflavinas y tearubiginas, de color anaranjado o rubí, que dan la coloración rojiza característica al té negro.
Por dicho motivo, el té verde, contiene hasta un 30% de catequinas, frente a un té negro, por ejemplo, que no conserva ni contiene dicha proporción, o un té descafeinado, que también pierde parte sustancial de dichos principios. El modo de preparación de la infusión también varía su contenido.
Otros flavonoides que también contiene, son algunos taninos condensados y las proantocianidinas. Se trata de flavonoides que tienen funciones protectoras sobre los capilares sanguíneos y especialmente sobre la salud de la vista. Los carotenos le confieren color, aromas florales, los encontramos en forma de betacarotenos, neoxantinas, xantofilas, etc.
También contiene fitoquímicos del tipo no flavonoides, como los ácidos fenólicos, como el ácido gálico, el ácido cafeico y el ácido clorogénico, llegan a concentraciones de hasta el 35%. Confieren al té propiedades astringentes, densidad, coloración y sabores florales.
Diferencia del contenido medio en catequinas de los diferentes tipos de tés:
AROMAS DEL TÉ
Los compuestos aromáticos del té varían en función del procesado del té. La fermentación, además de concentrar los aromas, también implica cambios debidos a las reacciones de oxidación, se intensifican los aromas frutales y florales, también su sabor amargo, se oscurece su color y se acrecienta su astringencia.
*Artículo relacionado: Alternativas a la cafeína del café.
Más información sobre el té.
18 febrero, 2022
