Plantas medicinales para el hígado

Tratamiento natural del hígado enfermo con plantas medicinales

¿Para qué sirve el hígado?

Las principales funciones del hígado son:

• Producir proteínas
• Metabolizar los alimentos, propiedades digestivas
• Producir bilis y almacenarla en la vesícula biliar, que a su vez la expulsará en el intestino a través de los conductos biliares.
• Depurar la sangre, actuando como filtro corporal de las toxinas como el ácido úrico, residuos del metabolismo, metales pesados y tóxicos de los alimentos.
• Interviene en la activación de hormonas como la vitamina D

Causas de las enfermedades del hígado

Las enfermedades del hígado se pueden producir por multitud de causas.

Una de las principales enfermedades de este órgano es la inflamación del hígado o daño hepático producido por el consumo de alcohol (cirrosis), que constituye una de las principales causas de cáncer de hígado.

El hígado también puede caer enfermo como consecuencia de una alimentación muy desequilibrada, en aquellos casos en los que se consume un exceso de alimentos procesados, exceso de azúcares, sirpoes, grasas saturadas, trans,etc., derivando en un problema de hígado graso o piedras en la vesícula.

Otras causas de enfermedad hepática pueden ser genéticas (enfermedad de Wilson) o producidas por infecciones víricas (hepatitis).

¿Qué enfermedades puede tener el hígado?

Entre las principales causas que hacen enfermar al hígado se encuentran las siguientes:

• Insuficiencia hepática
• Hepatitis B
• Hemocromatosis (Acumulación excesiva de hierro en el organismo)
• Enfermedad de Wilson (Acumulación excesiva de cobre)
• Cirrosis
• Falta de riego sanguíneo por enfermedades como la insuficiencia cardíaca.
• Infecciones microbianas, como la goma sifilítica.
• Entrada de tóxicos en el organismo. Entre ellos, medicamentos (principalmente antibióticos, antiinflamatorios y analgésicos), productos tóxicos industriales, plantas venenosas, setas venenosas, etc.
• Alcoholismo
• Otras enfermedades

Síntomas del hígado enfermo

La mayoría de las veces, el hígado graso no presenta ningún síntoma. Se estima que sólo con un 10% de células hepáticas sanas, el hígado puede mantener todas sus funciones vitales. Por este motivo, los síntomas de una enfermedad hepática pueden presentarse cuando ésta ya se encuentra en un estado avanzado.

En casi todas estas enfermedades se suelen presentar los síntomas siguientes:

• Dolor de cabeza
• Hinchazón general del cuerpo por acumulación de líquidos
• Color oscuro de la orina
• Digestiones pesadas
• Ictericia o color amarillento de la piel y del blanco del ojo
• Dolores musculares
• Falta de apetito

Fitoterapia: Preparados con plantas medicinales para el hígado

La tradición de la medicina natural y los estudios científicos avalan el efecto protector de algunas plantas para la salud del higado, al ayudar a este órgano a que se regenere o colaborar en la curación de determinadas enfermedades del hígado.

Para curar el hígado es muy recomendable adoptar ciertos hábitos como abandonar el consumo de alcohol y otros tóxicos (drogas, tabaco, etc.) y llevar una dieta rica en fibra y baja en grasas. En todo caso se debe consultar con un especialista antes de tomar algún remedio con plantas, y las contraindicaciones de cada planta, que se encuentran en su estudio detallado.

¿Cuáles son las hierbas curativas mejores para el hígado?

Entre las plantas adecuadas para el hígado son las siguientes:

Cardo mariano para regenerar el hígado

El cardo mariano (Silybum marianum) es una de las principales plantas utilizadas en los tratamientos naturales para el hígado.

Su principio activo, componente denominado silimarina, estimula la regeneración del hígado, disminuye la inflamación y mejora la función hepática. Para curar la congestión del hígado se utilizan las raíces y los tallos así como el jugo de sus hojas machacadas en la proporción deseada.

La silimarina, el principio activo, no es soluble en agua, por lo que se toma en cápsulas de extracto de silimarina.

(Cápsulas de extracto de silimarina, según indicaciones del prospecto. Generalmente se recomienda 1 cápsula de 500mg., 3 veces al día — la dosis puede variar según la concentración del extracto de cada producto).

Alcachofa para el hígado

La alcachofera (Cynara scolymus) pertenece a la misma familia que el cardo mariano, y como éste, también constituye una planta muy adecuada para el hígado.

La alcachofa protege el hígado y ayuda a su recuperación en caso de enfermedad hepática (hígado graso, ictericia, hepatitis, insuficiencia hepática, etc.).

Su principio activo, la cinarina, que favorece la correcta función biliar.

Se puede consumir como suplemento o tomada en la alimentación habitualmente para obtener sus beneficios para los problemas del hígado. (Tomar extracto de alcachofa de venta en tiendas de productos naturales de acuerdo a las condiciones del prospecto) (Comer alcachofa habitualmente).

Cúrcuma para el hígado

La cúrcuma (Curcuma longa) es una planta aconsejable para los problemas hepáticos. Sus principios activos, la curcumina y otros compuestos como el eugenol, ayudan a mejorar la salud del hígado. Estudios científicos han observado la capacidad de la cúrcuma como tónico biliar y protectora del hígado. En estudios in vitro e in vivo, la cúrcuma presentó propiedades hepatoprotectoras.

El extracto de cúrcuma impide la formación del exceso de colesterol y previene el hígado graso. (Cápsulas de extracto de cúrcuma según indicaciones del prospecto)

(Infusión de 20 gramos (4 cucharaditas) de cúrcuma en polvo, en 1 litro de agua. Reposar durante 12 horas. Filtrar con la ayuda de una tela y beber el preparado en varias tomas durante las siguientes 12 horas)

Otras plantas adecuadas para el hígado

• Manzanilla (Matricaria chamomilla): es una de las infusiones más reconocidas en fitoterapia por las numerosas afectaciones para las que se utiliza, tanto en uso interno como externo. También hay que mencionar el valor de esta planta como colagogo, es decir que estimula la expulsión de la bilis por parte de la vesícula. (Infusión de una cucharadita de flores secas por taza de agua. Tomar de 2 a 3 tazas por día)

• Diente de león (Taraxacum officinale): Es un buen estimulante de la función hepática y biliar, siendo muy útil en aquellos casos en que se presente hepatitis o digestiones lentas. (Decocción de 100 gr. de raíces en litro y medio de agua. Tomar tres tazas al día)
• Romero (Rosmarinus officinalis ) (Decocción de una cucharada de hojas secas por taza de agua. Beber una taza en ayunas) (Utilizar romero en la alimentación como especia)
• Infusiones mixtas: Una buena manera de combinar los efectos beneficiosos de las tres primeras plantas sería tomar 3 infusiones mixtas de diente de león y hojas de alcachofera y por la mañana una cucharadita de aceite de oliva virgen y limón para la vesícula.
• Moringa (Moringa oleifera) En estudios realizados sobre animales, se comprobó que la moringa era tan efectiva como las estatinas en la reducción del colesterol. Igualmente se vio que los productos extraídos de las hojas de esta planta son capaces de inhibir la formación de ateromas en las arterias.
• Boldo (Peumus boldus): Tiene propiedades protectoras para el hígado, debidas a la boldina y a los flavonoides de la planta, entre los que destacan las catequinas. (Infusión 1 cucharadita de hojas secas por taza de agua. Los tratamientos de más de 4 semanas están contraindicados).

• Achicoria (Cichorium intybus) (Maceración durante un par de semanas de 35 gr. de raíces secas trituradas en un litro de vino blanco de Jerez. Un vaso diario repartido en varias cucharadas al día)
• Níspero (Eriotrobya japonica): En un estudio se observó que el níspero mejora la función hepática, ayuda a tratar el hígado graso y la fibrosis, siendo un alimento adecuado para personas con enfermedades del hígado, como la cirrosis, el hígado graso y la hepatitis. (Comer este fruto en abundancia)
• Lichi: Es un fruto beneficioso para el hígado, tal como demostró un estudio a doble ciego, en el que se determinó el poder protector del lichi en animales con el hígado dañado. Los resultados mostraron que los animales alimentados con lichis tenían niveles de transaminasas más bajos y menor daño en el tejido hepático.
• Mejorana (Origanum majorana): Además de ayudar a las digestiones estomacales, contiene una sustancia hepatoprotectora, el ácido ursólico, que, además de su actividad antitumoral, la convierte en una planta adecuada para las enfermedades del hígado. (Infusión 5g. de hojas y flores secas en 250ml de agua. De dos a tres tazas al día)
• Tila: (Tilia sp.) Las propiedades coleréticas y colagogas de la corteza de tila resultan eficaces en los casos de insuficiencia hepática. (Tomar preparados de jarabe o tintura de venta en farmacias de acuerdo a las condiciones del prospecto)
• Ajenjo: (Artemisia absinthium) (Infusión de una cucharadita de planta seca por taza de agua durante 5 minutos. Tomar 2 tazas al día sin endulzar poco a poco)
• Aceituna (Olea europea) En algunos casos puede estar indicado tomar una cucharada de aceite de oliva en ayunas, a la que se le añade unas gotas de jugo de limón.
• Estragón (Artemisia dracunculus) Fluidifica la bilis y ayuda a limpiar el hígado y la vesícula biliar. (Infusión de 5g. de hojas secas en 250ml. de agua).
• Agrimonia ( Agrimonia eupatoria) (Beber un par de tazas al día de la infusión de una cucharadita de flores secas por taza de agua después de las comidas)
• Abedul (Betula alba L.) (Infusión de una cucharadita de hojas secas por taza de agua. Tomar una taza después de cada comida principal)
• Berro: (Nasturtium officinale) Los berros ayudan a limpiar el hígado y facilitan su recuperación. (Comer la planta fresca en ensaladas) (Alerta posible toxicidad)
• Alpiste (Phalaris canariensis): tiene propiedades antiinflamantorias que pueden ser útiles para el hígado. (Leche de alpiste)
• Rúcula (Eruca vesicaria): Por tratarse de un buen amargo, estimula la producción de jugos y mejora las digestiones.
• Azafrán (Crocus sativus): contiene crocetina, un componente colerético que estimula la producción de bilis y la fluidifica, ayudando al proceso digestivo (Tomar 0,5g. de azafrán, antes de la comida. Hasta dos tomas al día. No superar 1,5g. diarios.).
• Pitahaya: (Hylocereus undatus) La composición rica en antioxidantes de la flor y los frutos de la pitahaya sugieren que esta cactácea puede tener efectos beneficiosos para el hígado.

Atención: Las plantas mencionadas en este artículo tienen un poder diurético grande, por lo que llevan a la eliminación de la orina muy abundante, lo que puede llevar a una descompensación de la tensión en algunos casos, cuando el paciente presente tensión alta o baja. En caso de problemas de la tensión o problemas cardíacos, consultar con un médico. No utilizar las plantas anteriores si hay problemas de cólicos.

Más información sobre el tratamiento natural del hígado, remedios naturales y dieta.

Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

4 octubre, 2022