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Vitaminas y minerales que pueden ayudar a mejorar la esquizofrenia
La utilización de suplementos para la esquizofrenia supone utilizar unos recursos destinados a mejorar el estado de la mente o disminuir los síntomas que acompañan a esta enfermedad.
El uso de estos suplementos puede constituir una ayuda al tratamiento convencional y, dada la importancia del buen funcionamiento de este tratamiento, requiere la aprobación por parte del especialista.
Entre los principales tenemos:
Ácidos grasos esenciales para la esquizofrenia
La ingestión de ácidos grasos esenciales Omega-3 puede ayudar a mantener el equilibrio mental y mejorar la depresión o ayudar en enfermedades como la esquizofrenia.
Constituyen una forma de ingerir ácidos grasos omega-3 para aquellas personas que no lo toman de fuentes vegetales o que no comen suficiente pescado. Se toman en forma de cápsulas que contienen aceites de pescado o de los complementos en forma de cápsulas, aceite o polvo del aceite de linaza.
La dosis habitual suele ser de 3000 mg diarios repartidos en 3 tomas. (La ingestión de aceite de pescado, junto con otros anticoagulantes, puede disminuir demasiado la capacidad de coagulación sanguínea o la regulación del azúcar en la sangre entre personas diabéticas, por lo que debe consultarse con el médico antes de emprender la medicación.)
Vitaminas del grupo B para la esquizofrenia
La vitamina B ayuda a mejorar el estado mental de estos enfermos y a contrarrestar los efectos negativos de los medicamentos utilizados en el tratamiento de la enfermedad.
La dosis habitual suele ser de dos cápsulas diarias de 50 mg junto con 200 mcg de ácido fólico en las comidas principales.
Vitamina C para la esquizofrenia
La vitamina C parece tener una influencia positiva en el tratamientos de enfermos de Alzheimer o de otros tipos de demencia. Sus propiedades antioxidantes ayudan a evitar la influencia negativa de los radicales libres en las neuronas.
Las dosis habituales suelen ser de unos 1000 mg diarios.
Ginseng para la esquizofrenia
El ginseng (Panax ginseng) ayuda a combatir algunos síntomas de la esquizofrenia al aumentar la producción de endomorfinas que ejercen un efecto positivo en la mente del esquizofrénico.
La dosis habitual es de 200 a 400 mg diarios repartidos en dos tomas (No administras junto con antidepresivos. No tomar durante el embarazo en enfermedades cardíacas o problemas de tensión arterial. Tomar durante un mes o mes y medio y. luego descansar el mismo tiempo. Puede originar somnolencia, problemas estomacales, dolor de cabeza o mayor sensibilidad en los pechos)
Más información sobre la esquizofrenia.
11 noviembre, 2024
