|
Contenidos
El vegetarianismo y la economización de recursos
Como se ha explicado anteriormente, una alimentación vegetariana, requiere un menor consumo de plantas al no tener que alimentar a ningún animal para ser posteriormente consumido por las personas.
Esto se traduce en:
– La no existencia de granjas de animales.
– En no tener que alimentarlos
– En no tener que matarlos
– En no existir el consumo de éstos.
Lo cual conlleva, una serie de consecuencias encadenadas que disminuyen el gasto desmesurado de recursos y de afectación de la tierra si esta deber ser cultivada masivamente para alimentar los animales.
Ventajas de una alimentación exclusivamente vegetal
Si nos alimentamos exclusivamente de alimentos de origen vegetal, no se requiere de la existencia de granjas de animales, por tanto, como no debemos alimentarlos para que crezcan y poder consumirlos, todos esos alimentos que se destinan a la alimentación de dichos animales pueden destinarse directamente a la alimentación de las personas.
Con lo cual, también evitamos un masivo consumo de plantas y un masivo arado de las tierras para su cultivo y siembra, ya que no se necesitarían cantidades tan altas de producción.
Además, conseguiríamos que con dicha menor producción de cultivos, se pudieran nutrir muchísimas más personas, a la vez que no se perjudicarían tanto las tierras (el medio ambiente y la naturaleza) con cultivos masivos innecesarios.
Los alimentos de origen animal no son rentables a nivel de producción
Se considera que para conseguir un kilo de carne para consumir, se debe alimentar al animal, con una media de 15 veces dicho peso de pienso. Este pienso, habitualmente suele estar elaborado por cereales, granos y legumbres como la soja. Si destinamos esta cantidad de alimentos que forman el pienso, a un consumo directo para las personas, nos ahorramos 14 kilogramos, que se “desperdician” cuando alimentamos animales para el consumo humano.
Además, debemos tener en cuenta que un kilo de soja tiene una cantidad aproximada de proteína de unos 350 gramos, mientras que un kilo de ternera tiene la cantidad aproximada de 200 gramos de proteína. La cantidad de proteína que aportamos con la soja es mayor. De hecho es casi el doble, ya en la misma cantidad de alimento, en comparación con la carne.
Si, además, contemplamos los 14 kilogramos de diferencia, que se emplean para formar el kilo de carne, resulta insostenible la defensa del engorde de animales como alimento. Con una alimentación a base de alimentos de origen vegetal obtendríamos las siguientes ventajas:
– Más cantidad de alimentos
– No habría la necesidad de criar animales para luego sacrificarlos y podríamos alimentar a muchísima más población, sin desperdiciar recursos, sin matar a ningún animal y con menor necesidad de realizar cultivos masivos (menor biodiversidad) para mantenerlos.
– Además de los alimentos destinados a la elaboración del pienso, también se destina mayor cantidad de agua para los animales, que la que puede necesitar una cosecha para ser fructífera. Se requiere agua tanto para que beban los animales, como para limpiar los despojos de mataderos y mantener la higiene en las granjas.
Más información del vegetarianismo:
– La evolución del vegetarianismo hasta la actualidad.
– Los sentimientos de los animales y de las plantas. La ganadería y las granjas de animales.
– El vegetarianismo contra el cambio climático y la contaminación ambiental.
Más información sobre el vegetarianismo.
4 junio, 2020