Cómo suplementar B12 y ácido fólico en Parkinson

Alimentos ricos y suplementación con vitaminas: cantidad, dosis recomendada y precauciones

Parkinson y aumento de necesidades de vitaminas B

La enfermedad de Parkinson es un trastorno neurodegenerativo que causa la disminución de dopamina. El tratamiento farmacológico consiste en administrar levodopa y medicamentos que aumenten la biodisponibilidad de la levodopa, para que llegue mucha levodopa llega al cerebro, y allí ésta sustancia se convierta en dopamina.

Por el momento, la levodopa es el remedio más efectivo que se ha encontrado para mejorar los síntomas de la enfermedad de Parkinson, pero el tratamiento produce efectos adversos, entre los que se encuentran un aumento de los niveles de homocisteína y una disminución de las vitaminas B12 y ácido fólico. Afortunadamente, estos inconvenientes se pueden paliar a través de la dieta, un estilo de vida saludable, y si es conveniente, con suplementos.

¿Por qué es importante aumentar la ingesta de vitaminas B12 y B9?

El mayor peligro que presentan los niveles bajos de vitamina B12 y ácido fólico es el incremento aún mayor de la homocisteína (recordemos que los medicamentos antiparkinsonianos ya aumentan la homocisteína). Las personas interesadas en profundizar sobre el tema (detalles técnicos y metabolismo), vean este artículo sobre el porqué en el parkinson hay falta de vitaminas B12 y folato.

¿Es grave la disminución de vitamina B que producen los tratamientos contra el parkinson?

Afortunadamente, no se trata de un efecto adverso grave, pues les avanzamos que esto tiene solución fácil.

¿Qué problemas tiene el aumento de la homocisteína?

La homocisteína alta resulta muy dañina porque va deteriorando progresivamente los vasos sanguíneos y el corazón. Por todo ello, niveles de homocisteína alta aumentan el riesgo cardiovascular y de neuropatía. Por ejemplo, los científicos han descubierto que niveles altos de homocisteína son incluso más dañinos que el temido colesterol.

Remedios los efectos adversos de los medicamentos para el Parkinson

Es relativamente fácil y económico compensar este inconveniente de la medicación antiparkinsoniana. Para eliminar homocisteína hace falta ácido fólico (vitamina B9), vitamina B12 y la piridoxina (vitamina B6). Buenos niveles de estas vitaminas son necesarias para disminuir el riesgo de daño cardiovascular.

El lector probablemente estará pensando automáticamente en la suplementación con estas vitaminas, pero hay una serie de consideraciones previas importantes:

• Es necesaria una dieta saludable que potencie los alimentos más ricos en vitamina B12 y ácido fólico.
• Se tiene que evitar el tabaco y el alcohol porque es lo que más aumenta la homocisteína, además de suplementar o tomar alimentos ricos en estas vitaminas para disminuir la homocisteína.
• No se deben tomar suplementos por cuenta propia, sin consultar con el médico.

Factores que aumentan la homocisteína

La homocisteína puede aumentar como efecto secundario del tratamiento farmacológico del parkinson, pero también existen otros factores que pueden favorecer o provocar el aumento de los niveles plasmáticos de homocisteína:

• Dieta deficitaria de vitamina B9, B12 o B6: lo que se traduce en consumir pocas verduras (las espinacas son los alimentos más ricos en B9), poco pescado graso o marisco (los más ricos en B12) e insuficiente cantidad de legumbres, frutos secos y productos de origen animal (todos los alimentos proteicos, vegetales y animales, son ricos en B6)
• El tabaquismo y el alcohol aumentan mucho los niveles de homocisteína. Por este motivo se recomienda dejar el tabaco y se suplementa con estas vitaminas a las personas alcohólicas.

¿Cómo mejorar la dieta?

A grosso modo, los alimentos que más nos pueden ayudar a aumentar el aporte de estas vitaminas, son:

• Alimentos muy ricos en ácido fólico: principalmente las espinacas, el aguacate, lentejas, garbanzos, nueces, almendras y naranjas.
• Alimentos muy ricos en vitamina B12: principalmente el pescado graso y marisco.

Lámina sobre cómo se toman normalmente los suplementos de B12 y ácido fólico en parkinson. Los medicamentos utilizados disminuyen la vitamina B12 y ácido fólico y se recomienda aumentar el aporte de estas vitaminas.

¿Se recomienda suplementar los tratamientos de Parkinson con vitamina B12 y ácido fólico?

Por los efectos de estas vitaminas sobre la reducción de los niveles de homocisteína, su escasa toxicidad, y los niveles bajos que se observan en enfermedad de Parkinson como consecuencia de la medicación, todo parece indicar que la complementación del tratamiento con estas vitaminas es seguro y recomendable.

Existen pocos ensayos clínicos sobre la suplementación con ácido fólico y vitamina B12, pero los primeros que se encuentran ya muestran resultados prometedores al conseguir una disminución de los niveles de homocisteína en sangre. Además, tiene la ventaja de que es relativamente fácil y económico tomar suplementos de vitaminas B9 y suplementos de vitamina B12 (algunos profesionales también pueden recomendar vitamina B6, aunque ésta vitamina es abundante en casi todos los alimentos y por ello no se le suele suplementar).

• Antes de plantearse tomar suplementos de vitaminas, hay que tener en cuenta que éstos no sustituyen una dieta y estilo de vida saludables. Se recomienda comer los alimentos mencionados en el apartado anterior.

¿Cómo suplementar la vitamina B12 y ácido fólico en pacientes con Parkinson?

Los estudios hasta el momento han utilizado dosis de 800 mcg de ácido fólico + 1.000 mcg de vitamina B12 al día.

Cómo tomar vitaminas B12 y ácido fólico

¿Cuándo se recomienda tomar estos suplementos?

Se recomienda tomar durante las comidas principales, cuando no se tome la levodopa. Las vitaminas B no disminuyen su asimilación si se toman con las comidas, por lo que no es necesario tomarlas en ayunas. Además, es mejor separar los suplementos de los medicamentos, por precaución (aunque no se han detectado interacciones entre ambos).

Personas a quienes no les gusta tomar suplementos

Si la persona no se siente a gusto tomando el suplemento diariamente, cabe mencionar que estas vitaminas tienen una vida relativamente larga, por lo que, si la dieta es adecuada y no hay deficiencias, se podría tomar esta suplementación cada dos o tres días, o incluso una dosis semanal, a modo de prevención o mantenimiento.

¿Cuesta tragar las cápsulas?

Si hay problemas para tragar las cápsulas de vitamina B12 o de ácido fólico enteras, no hay problema con que éstas se trituren y se añadan en cualquier receta (sin cocción, porque son termosensibles).

¿Por qué el médico no le ha dado este suplemento junto con sus medicamentos para el parkinson?

Muchos médicos aún no lo recomiendan a sus pacientes. Esto es debido a que son necesarios más estudios clínicos antes de realizar una recomendación definitiva.

El motivo de esto es que, aunque sabemos perfectamente que la toxicidad de las vitaminas B9 y B12 es muy baja, existe la posibilidad, aunque no se ha observado por el momento, de que estas vitaminas modifiquen de algún modo los efectos de la medicación o produzcan algún otro síntoma. Por este motivo, por precaución, es posible que su médico no le recomiende tomar suplementos aún.

¿Se recomienda tomar suplementos de ácido fólico y B12 por su cuenta?

No se recomienda tomar estos suplementos sin la supervisión de su médico. El facultativo es la persona que está más al día sobre los nuevos hallazgos y puede proporcionarle información útil, además, hacerle conocedor de estas terapias ayuda a enriquecer su experiencia clínica. Por todo ello siempre se recomienda que su médico supervise cualquier suplementación.

¿Y si el médico no me deja tomar los suplementos?

Es posible que su médico no le aconseje tomar suplementos de vitaminas B por un tema de precaución. En cualquier caso, sabemos que una dieta puede aportar niveles adecuados de estas vitaminas, por lo que recomendaremos potenciar los alimentos que son más ricos:

Dieta para disminuir la homocisteína

Más información sobre la enfermedad de Parkinson.

Escrito por Elisenda Carballido Dietista nutricionista. Postgrado en Fitoterapia y máster en Nutrición y Metabolismo.

3 noviembre, 2019