Tratamiento natural hígado graso en niños

Infusiones, alimentos y plantas para la obesidad infantil

Cuidados del hígado graso en los niños con obesidad

El hígado graso es una enfermedad que, desafortunadamente, cada vez es más frecuente en niños y adolescentes. Se produce en población pediátrica con obesidad, y suele cursar con inflamación del hígado, colesterol alto, triglicéridos altos, diabetes. Puede derivar en una cirrosis hepática, situación grave que afecta a todo el organismo.

Importancia del entorno en la educación nutricional del niño

Los niños no tienen la capacidad para saber qué es lo que más les conviene comer y tomar para curarse, por lo tanto, son los padres quienes, conjuntamente con el equipo sanitario y el centro escolar, tienen la responsabilidad de proporcionar al niño el entorno necesario para su curación y re-educación alimentaria.

Se recomienda el tratamiento multidisciplinar de la obesidad infantil con dietistas nutricionistas, psicólogos, fisioterapeutas, pediatras y pedagogos.

¿La culpa del hígado graso de los hijos es de los padres?

Durante muchos años, los gobiernos han permitido la publicidad de productos alimenticios muy procesados que no son nada saludables. Un claro ejemplo de ello son los refrescos azucarados, que hoy en día son omnipresentes en nuestra sociedad.

A pesar de toda la información existente sobre nutrición y dietas, las etiquetas de los alimentos siguen siendo muy complicadas de entender, y se sigue permitiendo la publicidad engañosa, como los «yogures 0% grasas» pero que tienen lo equivalente a 4 terrones de azúcar.

Por otra parte, en los centros educativos, como universidades y colegios, se permite el consumo y la venta de productos insanos, como los néctares industriales, yogures azucarados, bollería, refrescos, chocolatinas y caramelos.

Incluso en los propios hospitales se permite la venta de productos perjudiciales para la salud, es decir, alimentos muy procesados, como chocolatinas, snacks, bollería, galletas,… productos con mucha sal, harinas, grasas malas y mucho azúcar.

Todos estos factores son los que se estudian como ambiente obesogénico, que se considera un gran causante de obesidad. Por todo ello, es un gran error culpabilizar a los padres de la obesidad del niño, pues todos los padres desean lo mejor para sus hijos.

¿Quién es el responsable de la obesidad infantil?

Se debe exigir a las autoridades sanitarias y a los gobiernos auténticos planes de salud pública contra la obesidad que abarquen todos los sectores, desde la educación nutricional en las escuelas, a la subvención y abaratamiento de los alimentos saludables (verduras, hortalizas, frutos secos y frutas), así como la prohibición de la publicidad engañosa y la mejora del etiquetado de los alimentos. Por ejemplo, no se debería permitir que la comida chatarra llevase juguetes para niños.

Mientras los verdaderos responsables de la creciente epidemia de obesidad (infantil, juvenil, y en adultos) no se mobilizan, es el entorno más cercano al niño, profesionales sanitarios, profesores y família, quienes deben reeducarle y proporcionarle todo lo necesario para su curación.

Tratamiento natural del hígado graso en los niños

La obesidad es perjudicial para el futuro del niño y puede llegar a ser incapacitante, por las secuelas psicológicas, físicas y emocionales que puede tener. Afortunadamente, un tratamiento adecuado puede revertir esta situación.

El tratamiento natural del hígado graso en los niños consiste en:

• Tratamiento multidisciplinar de la obesidad intantil. Se recomienda trabajar en equipo pediatras, psicólogos clínicos, fisioterapeutas y dietistas nutricionistas en la educación del niño y de su entorno familiar
• Dieta saludable para toda la familia. Los niños no deben comer distinto a sus hermanos o padres, sean estos delgados o no.
• Actividades enfocadas a la mejora de la autoestima, como pintura, danza, música, pasear, conversar, ajedrez,… Siempre que sea posible, promover la actividad física al aire libre
• Evitar el sedentarismo: evitar la televisión, la consola o el sofá. Dependiendo del caso, es recomendable el consejo profesional (profesores, psicólogos,…)
• Perder peso, pero huir de cualquier dieta milagrosa, hipocalórica estricta, o de preparados tipo batidos o sustitutivos de comida. Adelgazar debe ser la consecuencia natural y progresiva de una dieta saludable.
• Suplementos y plantas medicinales que ayuden al organismo a curar la enfermedad hepática existente
• Dormir el tiempo suficiente. Es importante que los niños duerman las horas que les toca, dependiendo de la edad. Dormir por la noche permite que el ritmo circadiano de hormonas ocurra, como la melatonina. Dormir bien es antiinflamatorio y bueno para la salud.

¿Qué plantas medicinales pueden ayudar a curar?

Los pilares fundamentales para la curación del hígado graso son una dieta saludable, el ejercicio, evitar el sedentarismo y quitar los refrescos y productos alimentarios ultraprocesados. Además, existen una serie de recursos naturales que se pueden utilizar para mejorar la curación del organismo.

Por lo tanto, ante todo, es importante insistir en que el uso de suplementos nutricionales solamente resulta beneficioso cuando la alimentación y el estilo de vida son saludables.

Suplementos de plantas, minerales y vitaminas para niños con hígado graso

Dentro del mundo de los suplementos, no todos son útiles, ya que existen muchos en el mercado que son de mala calidad. Por ello aquí se resumen los suplementos de plantas medicinales, minerales y vitaminas que pueden ser realmente interesantes para frenar el hígado graso, que son:

• Cardo mariano (Silybum marianum): para descongestionar el hígado y porque disminuye el azúcar (antidiabético). Los triglicéridos y el colesterol altos que suelen acompañar la esteatosis hepática (hígado graso) provocan un mal funcionamiento hepático. Esta planta medicinal resulta muy beneficiosa para la curación del hígado y para la diabetes. Tomada en las comidas, evita los subidones de azúcar (Cardo mariano para el hígado) (Cómo tomar cardo mariano).
• Romero (Rosmarinus officinalis): planta medicinal antioxidante y hepática, muy rica en ácido ursólico (hepatoprotector). (Utilizar romero seco habitualmente en la alimentación, como hierba aromática)
• Cúrcuma (Curcuma longa): tónico biliar y protectora del hígado. La cúrcuma se utiliza como especia en muchas regiones del mundo, pues es el ingrediente principal del curry. Se recomienda introducir cúrcuma en polvo habitualmente en las comidas (ver recetas). Mezclar con 1 pizca de pimienta negra, porque esta aumenta la absorción de los curcuminoides, los principios activos de la cúrcuma. (Cómo tomar cúrcuma)
• Magnesio: el magnesio puede ser recomendable en hígado graso porque algunos estudios sugieren que podría prevenir la calcificación de las arterias, proceso asociado al colesterol alto y a la arteriosclerosis.
• Harina de algarroba: en estudios se ha demostrado que la adición de harina de algarroba en alimentos ayuda a disminuir el colesterol. Se puede utilizar habitualmente como endulzante natural (espolvorear sobre yogur, kéfir, frutas, infusiones o cualquier preparación, siempre sin azucarar) (Chocolate de algarroba)
• Canela en polvo: ayuda a disminuir el azúcar en sangre y mejora la sensibilidad a la insulina. Se recomienda comprar una canela de buena calidad, bien aromática, por ejemplo, la que procede de Sri Lanka, que se puede comprar en tiendas especializadas (espolvorear sobre yogur, frutas, infusiones o cualquier preparación)

Estos suplementos y plantas son los principales, aunque existen otros que también pueden ser recomendables, según criterio profesional y en casos más particulares, como la levadura nutricional, o el picolinato de cromo.

No es necesario tomar todos estos suplementos, ni todas las plantas a la vez. Es mejor empezar por la dieta, e introducir estas plantas y suplementos progresivamente, según criterio profesional.

Peligros de las terapias naturales en niños

Fíjense que en el apartado anterior no aparece ninguna dosificación o posología. Eso es porque en los niños, las plantas medicinales se deben utilizar con mucha precaución ya que son más sensibles a los posibles efectos adversos que estas pueden producir.

En esta página sobre plantas medicinales en niños encontrará una tabla donde poder calcular, aproximadamente, qué cantidad de planta debe administrarse en los niños en función de su edad.

Igualmente, no todas las plantas son adecuadas a todas las edades. Por todo ello, se recomienda el consejo y la supervisión de estos tratamientos por su médico pediatra.

Remedios NO adecuados para el hígado graso

Existen muchos productos que no reportan ningún beneficio para la salud. Entre las terapias que NO se recomiendan, se resumen los siguientes:

• No tomar multivitamínicos: Los suplementos multivitamínicos no solamente no tienen beneficios para la salud, sino que son perjudiciales debido a su comprobada toxicidad.
• No se recomiendan suplementos de omega 3 o de otros tipos de omega: no se recomiendan porque a través de la dieta se puede ingerir mucha mayor cantidad de omega 3 que con suplementos. La mejor fuente de omega 3 son las semillas de lino molidas, las nueces, las semillas de chía molida o las semillas de cáñamo. Si no es vegetariano, consumir pescado graso 2 veces a la semana (sardinas, caballa,…)

¿Se recomiendan los preparados diuréticos para la obesidad?

No se recomienda dar remedios o preparados diuréticos a los niños. Los diuréticos, como la cola de caballo, lejos de hacer perder peso, fuerzan los riñones a eliminar líquidos, junto con demasiado potasio y electrolitos.

Por ello no es seguro ni recomendable utilizar remedios diuréticos en niños. Lo que resultará muy beneficioso para aumentar la diuresis es una dieta rica en vegetales y frutas, como la rúcula, el brócoli, los rábanos, las cebollas, los espárragos, alcachofas, nabos, zanahorias, apio, y otros alimentos diuréticos, porque en los alimentos, los principios diuréticos se aportan de forma más equilibrada y en menor cantidad. Además, los vegetales contienen principalmente agua y sirven como fuente de hidratación.

¿Es bueno beber mucho líquido o agua?

Existe el mito o creencia popular de que beber mucho produce un efecto desintoxicante o depurativo del organismo, pero no es cierto. Obligarse a beber mucho líquido o agua, lo único que consigue es desmineralizar el cuerpo debido a la pérdida de electrolitos y minerales por la orina.

La cantidad de agua recomendada depende de las necesidades de cada niño o niña. Por ejemplo, un niño con una dieta rica en frutas y vegetales (90% agua) no necesitarían beber más de 1 litro de agua. Estos requerimientos pueden aumentar en verano o si aumenta la transpiración (deporte o sudoración).

• La mejor forma de hidratarse es beber agua y tomando vegetales en la dieta (las frutas y las verduras contienen principalmente agua)
• Beber mucho no elimina grasa
• No se recomienda tomar zumos o jugos, batidos, refrescos (tampoco light),etc.

*Véase: Beber mucho no adelgaza

¿Cómo debe ser la dieta del niño con hígado graso?

La dieta del niño con obesidad debe ser lo más natural posible, es decir, con abundancia de alimentos poco procesados y principalmente de procedencia vegetal. Se recomienda:

• Comer legumbres habitualmente: garbanzos, lentejas, guisantes, alubias, azukis, tofu, tempeh,…. Las legumbres se pueden comer cada día o casi cada día sin problemas (dudas sobre comer legumbres a diario), en forma de hummus, en las ensaladas, ensalada de lentejas, lentejas con verduras, garbanzos con espinacas,…
• Aumentar el consumo de vegetales: verduras, hortalizas y frutas frescas, que se pueden presentar como ensalada de zanahoria rallada con limón, crema de zanahoria, macedonia de frutas, yogur con fruta, etc.
• El mejor desayuno y merienda son las frutas enteras, que se pueden comer con un yogur natural, semillas y/o con frutos secos. Tampoco habría problema con comer dos frutas, dos yogures, o unas almendras de más, ya que todos ellos son alimentos con un índice glucémico bajo.

Lámina resumen sobre el tratamiento recomendado para niños con hígado graso y obesidad infantil. Se recomienda el consejo del pediatra antes de tomar cualquier planta o remedio.

Alimentos prohibidos para el hígado graso

• Evitar batidos de frutas, galletas, yogures azucarados, yogures diet o 0%, néctares industriales y otros alimentos que tienen mucho azúcar, mucha sal, grasas malas y/o edulcorantes. Las opciones naturales son mejores que las industriales.
• Disminuir el consumo de pan, pastas y cereales de desayuno. El hígado graso no tolera alimentos que suban rápido el azúcar en la sangre. Es preferible utilizar opciones integrales y, sobre todo, granos enteros, como las legumbres, la quinua o el arroz integral.
• La comida chatarra no debe estar en casa y mucho menos ser un «premio» que se consuma en «días especiales». Los «premios» no deben ser pizzas, comidas, ni refrescos. Es importante eliminar estos productos cuanto antes y, sobre todo, no considerarlos un regalo o premio. Pueden ser premios: cine, teatro, danza, espectáculos, circos, regalo de material escolar, patinaje, excursiones, actividades,etc.
• Comer es un acto social muy importante y la comida no debe ser motivo discriminatorio, sino todo lo contrario, un momento de comunión entre personas, sean família, compañeros de clase o amigos. Si en el entorno del niño hay mucha comida chatarra, es recomendable intentar mejorar la situación de los niños con el apoyo de los profesores y demás padres, no de forma unilateral.

Dieta para el hígado graso en niños

*Más información: Tratamiento de la obesidad en la adolescencia

Más información sobre remedios para el hígado.

Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

23 octubre, 2022