Fructosa en la diabetes

PROPIEDADES ALIMENTARIAS DE LA FRUCTOSA

Fructosa en la alimentación

La fructosa tiene especial importancia en nuestra alimentación, al ser uno de los hidratos de carbono simples más abundantes de la dieta.

Las principales fuentes dietéticas de fructosa son las frutas y zumos de fruta. En el organismo, la fructosa tiene un papel importante para la fertilidad masculina, al ser la fuente de energía principal que utilizan los espermatozoides.

Propiedades de la fructosa

Lámina-resumen con las propiedades de la fructosa.

La fructosa también la podemos encontrar en muchos endulzantes: la miel, melazas de cereales, jarabes, endulzantes como el azúcar de mesa (formado por glucosa y fructosa) y otros edulcorantes como el sorbitol.

Fructosa para la diabetes

Hasta no hace mucho, se consideraba la fructosa como un azúcar mucho más seguro que otros azúcares simples para las personas con diabetes.

Según esta opinión, la fructosa producía pocos efectos en el nivel de azúcar en la sangre y no estimulaba la producción de insulina, con lo que la fructosa se consideraba apta para diabéticos.

Aunque aporta las mismas calorías que el azúcar, la fructosa es más dulce que el azúcar, por lo que utilizada en menos cantidad, endulza más (dando como resultado el mismo dulzor, con menos calorías).

Por ello, se aconsejaba para la dieta de las personas con diabetes y en las dietas de adelgazamiento. Nuevos estudios han puesto en entredicho las supuestas ventajas de la fructosa:

¿Es buena la fructosa para diabéticos?

Las personas con diabetes deben tener en cuenta que la fructosa sí que influye en el nivel de azúcar en sangre. La ventaja que presenta respecto a la sacarosa es que se puede usar en menor cantidad (aportando menos calorías) y endulza más.

Por estos motivos también es adecuada para disminuir las calorías en dietas de adelgazamiento.

La fructosa se puede tomar, pero en moderación

Según los últimos estudios llevados a cabo por el Centro de Investigación Biomédica en Red-Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición (CIBERobn) llevado a cabo sobre animales, la ingesta prolongada de fructosa en cantidades elevadas aumenta la resistencia del organismo a la insulina, por lo que favorece el desarrollo de la diabetes.

Otros estudios realizados en Estados Unidos siguen en la misma línea. Según todos ellos, y a diferencia de lo que se pensaba hasta ahora, la fructosa, ingerida en grandes cantidades y habitualmente, resulta más peligrosa que la propia glucosa dado que no estimula la producción de insulina como el azúcar (La insulina es necesaria para controlar los niveles de azúcar en la sangre, y para que éste sea metabolizado por las células).

Todo ello puede conllevar al desarrollo de numerosas enfermedades metabólicas, incluyendo la obesidad, el aumento del colesterol, los triglicéridos, el ácido úrico y la diabetes tipo 2. Estos efectos descritos se deben al uso continuado y elevado de fructosa o alimentos ricos en fructosa (principalmente zumos a partir de concentrado, jarabes o néctares industriales).

La forma más saludable de tomar fructosa

Frutas

La fructosa se encuentra de formanatural en las frutas.

La fructosa que se encuentra de forma natural en los alimentos, frutas principalmente, es más saludable que la fructosa que se vende cristalizada y que podemos encontrar en zumos industriales, chocolatinas u otros productos:

La fructosa de las frutas

Las frutas, además de glúcidos como la fructosa, contienen fibra y agua, dos componentes que ayudan a regular la absorción intestinal de la fructosa, y además aportan vitaminas y minerales con beneficios para la salud.

Sin embargo, no se debe abusar de la fruta y se debe moderar su ingestión en caso de problemas metabólicos, como la diabetes o la obesidad. (Recordemos que la norma a seguir para la población sana son cinco piezas diarias entre frutas y verduras)

Es preferible comer fruta entera a zumos naturales de frutas. Estos también resultan adecuados pero con mayor moderación y siempre que, preferiblemente, estos zumos no contengan azúcares añadidos o que no procedan de concentrado.

*Información relacionada: ¿Qué alimentos tienen fructosa?

La fructosa procedente de los productos industriales

En cambio, la fructosa proveniente de los zumos de frutas, bebidas con fructosa, chocolatinas, u otros productos con fructosa añadida, es absorbida más rápidamente debido a que son pobres en fibra (que enlentece la absorción del azúcar), y normalmente, muy ricos en azúcares (como la fructosa). Todo ello puede producir hiperglicemia.

Los estudios han llegado a la conclusión que la fructosa resulta más peligrosa cuando se toma en forma líquida que cuando se ingiere la fruta fresca. No resulta pues recomendable sustituir una pieza de fruta por un zumo de fruta, y especialmente negativo resulta el consumo de bebidas refrescantes endulzadas con fructosa o el de productos edulcorados con fructosa.

*Más información sobre los Peligros de la fructosa en el menú del listado inferior.

Fructosa y obesidad

La fructosa tiene las mismas calorías que el azúcar. Los beneficios de la fructosa en dietas de adelgazamiento se deben a que ésta tiene un poder endulzante mayor que el azúcar.

Por este motivo, en menos cantidad podemos tener los mismos efectos endulzantes, con menos calorías.

El consumo excesivo de fructosa puede producir obesidad

Según los últimos estudios, el consumo abundante y prolongado de fructosa convierte al organismo en más resistente contra la leptina (hormona del apetito, que envía la señal de saciedad al cerebro). Por consiguiente, la persona no se siente satisfecha con la comida y sigue comiendo más.

De esta manera el organismo esta más expuesto a acumular grasa pudiendo desarrollar sobrepeso u obesidad.

Por estos motivos, no se debe abusar de la fructosa o alimentos con fructosa añadida, ya que puede tener efectos adversos a los que inicialmente queremos conseguir, como la reducción de calorías y pérdida de peso.

Tampoco debemos abusar de las frutas, que por su contenido en fructosa, en exceso, también engordan.

Fructosa, colesterol y triglicéridos

Se ha comprobado que el consumo excesivo de productos que contienen fructosa altera el metabolismo de las grasas y puede responsable de la disminución del colesterol bueno (HDL), triglicéridos, y del aumento del colesterol malo (LDL), con mayor riesgo de padecer problemas de arteriosclerosis.

Chocolate

Los peligros de la fructosa se deben principalmente al consumo excesivo de alimentos industriales con fructosa.

Además, el consumo excesivo de estos productos también puede producir lesiones reversibles en el hígado.

Estos efectos se producen principalmente por el uso irresponsable de los productos muy ricos en fructosa, como zumos de fruta industriales, chocolatinas, golosinas, y en general, aquellos en los que entre sus ingredientes contengan jarabe de maíz, jarabe de agave u otros jarabes.

¿Fructosa o azúcar?

Es importante moderar el consumo de azúcares simples, es decir, tanto de fructosa como de azúcar de mesa (sacarosa). La principal fuente de energía de nuestra alimentación la deben aportar los carbohidratos complejos como el pan, cereales y legumbres.

El consumo elevado de estos productos puede ser responsable, tal como hemos visto anteriormente, no solamente del desarrollo de obesidad, diabetes o triglicéridos, sino también de la aparición de otras enfermedades como envejecimiento prematuro, enfermedades del corazón, osteoporosis, caries dental, gingivitis, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, o menor resistencia a las enfermedades contagiosas por debilitamiento del sistema inmunológico o fatiga en general.

punto rojo Más información sobre LAS PROPIEDADES DE LA FRUCTOSA.

Este artículo ha sido avalado por Elisenda Carballido - Dietista nutricionista. Postgrado en Fitoterapia y máster en Nutrición y Metabolismo.
Editorial
Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

11 septiembre, 2024

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