Dieta para la esclerosis múltiple

Alimentación para la esclerosis múltiple

¿La alimentación causa esclerosis múltiple?

La dieta es muy importante en el tratamiento de la esclerosis múltiple, pues en algunos casos, una alimentación y estilo de vida saludables han conseguido revertir gran parte de los síntomas de esta enfermedad. Numerosos estudios parecen confirmar que algunos países poseen índices muy bajos de esta enfermedad debido al tipo de alimentos que consumen sus ciudadanos.

Importancia de la alimentación para la esclerosis múltiple

No se sabe si la alimentación, por sí sola, puede causar esclerosis múltiple, ya que parece haber otros factores relacionados. Sin embargo, dado el papel que tiene la dieta en la respuesta autoinmune del organismo, es muy posible suponer que la dieta y estilo de vida tienen un papel muy importante en la evolución y pronóstico de la enfermedad, como mínimo, como disparador de síntomas.

Según algunos estudios, los países que consumen mayor cantidad de ultraprocesados (comida chatarra), comestibles ricos en aditivos, harina, sal, grasas saturadas, grasas trans y azúcares añadidos, suelen ser los que presentan mayores índices de enfermos de esclerosis múltiple.

A nivel nutricional, se ha observado que esta enfermedad podría estar relacionada con una ingestión insuficiente de alimentos ricos en magnesio, en hierro, calcio y sin exposición solar al aire libre (déficit de vitamina D).

¿Qué países tienen menos esclerosis múltiple y qué tipo de comida tienen?

Se ha visto que aquellos países que consumen cantidades más elevadas de alimentos ricos en grasas saludables, naturalmente ricos en ácidos grasos esenciales omega 3 y omega 6, son los que tienen un número menor de enfermos. Esto podría explicar el hecho de que en los países industrializados del norte o centro de Europa y Asia la incidencia de esta enfermedad es muy elevada, mientras que otros países menos industrializados es menor.

También explicaría el que Japón, siendo un país muy industrializado, tenga un porcentaje de enfermos mucho menor que Centroeuropa o Estados Unidos, dado que la dieta japonesa incluye mucha cantidad de soja y pescado azul, alimentos muy ricos en ácidos grasos esenciales.

Dietoterapia para la esclerosis múltiple

En todos los protocolos de dietas para la esclerosis múltiple se elimina completamente la comida ultraprocesada, el gluten y los lácteos. Normalmente se añaden suplementos de vitamina D y se incluyen alimentos ricos en omega 3 cada día.

Existen casos de dietoterapia para la esclerosis múltiple con mucho éxito. Uno de los más conocidos es el que aparece en The Wahls Protocol, un libro escrito en primera persona que relata cómo la doctora Wahls, diagnosticada de esclerosis múltiple, consiguió mejorar su enfermedad con este tipo de alimentación, entre otros cambios importantes de ejercicio, aire libre y gestión del estrés.

Hay otros protocolos, además de Wahls, como el Swank (dieta baja en grasa saturada, sin lácteos y con suplementos de aceites de pescado y vitaminas) y Jelinek (igual que la anterior, con meditación y aceite de linaza). También se puede readaptar una dieta paleo, con el consejo del dietista nutricionista.

Alimentos adecuados para la esclerosis múltiple

¿Qué se debe comer con esclerosis múltiple? Entre los alimentos que son buenos para la esclerosis múltiple, tenemos los siguientes:

• Alimentos ricos en ácidos grasos esenciales: Estudios comparativos llevados a cabo en Japón han demostrado que los habitantes de esta nación son poco propensos a sufrir esta enfermedad. Se cree que esto se produce porque los japonés incluyen en su dieta una cantidad muy elevada de pescado y soja, alimentos que son muy ricos en ácidos grasos esenciales. Un buen aporte sería comer pescado graso 2 veces a la semana, preferiblemente de tamaño pequeño, tipo sardinas, boquerones o caballa.
• Alimentos ricos en proteína vegetal: La proteína vegetal se utilizará para sustituir a la proteína animal, que debe ser menos abundante. Además constituyen una fuente excelente de minerales como el magnesio, vitaminas y fitoquímicos. Alimentos ricos en proteína vegetal son las legumbres (judías, lentejas, guisantes, garbanzos y, sobre todo soja y sus derivados como el tofu), frutos secos, etc.
• Alimentos ricos en vitamina C: La vitamina C constituye uno de los mejores antioxidantes. Comer alimentos que contengan esta vitamina ayudara a prevenir, retrasar o mejorar los síntomas de esta enfermedad al disminuir el efecto negativo que los radicales libres ejercen sobre las neuronas. (Dieta rica en verduras y frutas frescas) (Ver alimentos ricos en vitamina C)
• Alimentos ricos en vitamina E: Constituye otro antioxidante muy potente. Conviene comer alimentos ricos en vitamina E para mejorar los síntomas de esta enfermedad o retrasar su aparición. El aceite de oliva virgen es una fuente excelente. También el aceite de girasol no refinado, el aceite de germen de trigo, las semillas de girasol, las avellanas, almendras, etc.
• Alimentos ricos en vitamina B12: Se ha comprobado que los enfermos de esclerosis múltiple suelen tener niveles de cobalamina bastante bajos. Comer alimentos que contengan esta vitamina podría mejorar su estado. Los alimentos que contienen esta vitamina son principalmente alimentos de origen animal, dado que los vegetales poseen poco cantidad de esta vitamina. Entre los alimentos más ricos tenemos las almejas, el hígado, los riñones o el cerebro. (Ver alimentos ricos en vitamina B12 o cobalamina)

Dieta rica en vegetales para la esclerosis múltiple

Es fundamental ingerir muchas verduras, en cada comida del día. Se potenciarán aquellos vegetales de color verde intenso y de color naranja, que son indicativos de la presencia de clorofila y betacarotenos, componentes que aumentan nuestras defensas y ayudan al hígado en sus funciones depurativas.

Recetas muy recomendables (y sin gluten ni lácteos) son las siguientes: ensaladas con mucho verde, crema de zanahoria, ensalada de zanahoria, verdura al vapor, garbanzos con espinacas, tortilla de espinacas, sopa de ortigas, añadir remolacha o betabel a las ensaladas, alcachofas al horno, ensalada de plantas silvestres,…

Dentro de la opción de vegetales, se recomienda escoger aquellos que tienen más color y sabor, es decir, las verduras con más principios. Por ejemplo, es mucho mejor una rúcula, que una lechuga iceberg. La lechuga iceberg es prácticamente sólo agua y fibra, mientras que la rúcula tiene fibra, y además, muchos betacarotenos, clorofila, y aporta glucosinolatos (sabor picante), con propiedades antioxidantes. Así que: + color y + sabor = + saludable.

Un pequeño consejo es sustituir la patata por zanahorias, o combinar ambas, para comer menos patata y más zanahoria. La patata, aunque no es perjudicial, es mejor sustituirla por zanahoria, porque no tiene tanta fécula y aporta más antioxidantes la zanahoria. Es mejor comer brócoli con zanahoria y patata, que solamente brócoli con patata.

Lámina resumen de la dieta para la esclerosis múltiple, qué alimentos son más beneficiosos y cuáles son malos o perjudiciales. Se recomienda ser estrictos en los puntos marcados en rojo.

Alimentos ricos en proteínas para la esclerosis múltiple

Como en toda dieta saludable, se deben comer alimentos ricos en proteínas, potenciando aquellas de origen vegetal. Las raciones de proteína pueden ser un plato de lentejas, un plato de garbanzos, tofu, hummus, huevos, tortilla de verduras,… En dietas no vegetarianas: carne blanca y pescado.

Hierbas aromáticas, la fitoterapia escondida en la cocina

Además de todos los consejos, es muy aconsejable comprar hierbas aromáticas de calidad y añadirlas en las recetas a diario. Aunque las plantas aromáticas y las especias no aparezcan en ninguna guía nutricional, son un componente muy interesante de la alimentación, tanto por su valor nutricional (son los alimentos más ricos en potasio), como por su valor medicinal (potentes antisépticos, antioxidantes y antiinflamatorios).

Alimentos NO adecuados para la esclerosis múltiple

¿Qué no se debe comer con esclerosis múltiple?

Entre los alimentos que no son buenos para la esclerosis múltiple, tenemos los siguientes:

• Tóxicos: El tabaco, el alcohol, el café y las bebidas excitantes deben eliminarse de la dieta.
• Gluten: Se debe eliminar por completo. Eso significa no tomar trigo, harinas, ni ningún otro cereal como la espelta, kamut, centeno, etc. El cuerpo tiene memoria y sólo se ven realmente los efectos de quitar el gluten a los 6 meses de dejarlo. En su lugar se puede comer castañas, quinua, boniatos y patatas.
• Lácteos: Se deben evitar por completo debido a su contenido en componentes que alteran el sistema inmunitario y el equilibrio hormonal. Puede sustituirse este tipo de leche animal por la leche de soja o de otros tipos.
• Alimentos ricos en grasas saturadas: Se debe evitar controlar las grasas en la alimentación, evitando al máximo las grasas saturadas. Lo mejor es realizar una dieta baja en grasas. (Se recomienda no comer más de 10 gr de grasas animales al día, excepto la proporcionada por el pescado azul que debe tomarse cada dos días)
• Alimentos que produzcan o puedan producir alergia o intolerancia: Progresivamente, una vez se hayan resuelto los puntos anteriores, se puede evaluar si existen alimentos que puedan resultar alérgicos para el paciente, como aquellos alimentos que aumentan la histamina. Para conocer que alimento es el causante de la alergia se puede emplear el método de la evaluación personal. Una manera sencilla de hacerlo es abandonar la ingestión de un alimento si se sospecha que produce la reacción. Si al cabo de unos días esta desaparece, se debe volver a introducir este alimento para ver si de nuevo produce la alergia. Nunca debe comerse el alimento sospechoso solo, sino mezclado con otros alimentos.

Aceites y grasas perjudiciales para la esclerosis múltiple

Circula por la red gran cantidad de información sobre las grasas. Muchas personas ya saben que las margarinas con grasa trans no son buenas, pero en cambio, siguen equivocándose al comprar aceite de oliva refinado y utilizar el aceite de girasol para freír. Los aceites refinados son muy perjudiciales, sobre todo si se calientan. Los aceites refinados son muy perjudiciales porque ya vienen «deteriorados» de fábrica. Su consumo aumenta el estrés oxidativo del organismo, que se traduce en más inflamación. El mejor aceite es el de oliva virgen.

A veces estos aceites refinados se esconden bajo nombres comerciales como «aceite de sabor suave» o «aceite de sabor intenso» ¡Ni caso! Solamente es bueno el aceite «virgen» u «obtenido por presión en frío».

Además de comer aceite del bueno, no hay que olvidarse de las demás grasas: es muy recomendable introducir en la dieta semillas de lino molidas o semillas de chía molidas, porque proporcionan gran cantidad de grasas omega 3, que no se encuentran en los aceites. El omega 3 muy adecuado para el buen funcionamiento de las neuronas y las transmisiones químicas y ejerce una acción antiinflamatoria. La ingestión de alimentos ricos en este ácido resulta muy adecuada en la prevención de enfermedades mentales, como la depresión o la esquizofrenia. El pescado azul, como el atún, la caballa o la sardina, también contienen buena cantidad. (Cómo tomar semillas de chía o de lino)

Otro ácido graso esencial es el omega 6, que también desempeña un papel muy importante en el funcionamiento de las neuronas y transmisiones químicas y posee demostradas propiedades antiinflamatorias. Entre los alimentos ricos en este tipo de ácido tenemos el aguacate, las nueces o los aceites de onagra, borraja, sésamo o girasol. (Evitar aceites refinados)

* Información relacionada: Aronia para la esclerosis múltiple

Más información sobre la esclerosis múltiple y su tratamiento natural.

Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

4 junio, 2020