Legumbres, cereales y semillas para autoinmunes

¿Qué semillas es mejor comer en enfermedades autoinmunes?

LEGUMBRES, CEREALES Y SEMILLAS EN LA DIETA PARA ENFERMEDADES AUTOINMUNES

¿Por qué en enfermedades intestinales no se consumen semillas?

Está documentado que, algunas veces, la retirada de algunas semillas de la alimentación, como cereales y legumbres, mejora las manifestaciones de las enfermedades autoinmunes. Debido a esto, existe un protocolo dietético en dietas autoinmunes que consiste en eliminar todos los granos e introducirlos poco a poco para observar tolerancia.

Cabe mencionar que el hecho de retirar estos alimentos no supone ningún tratamiento. Se debe realizar conjuntamente con unas pautas de tratamiento adecuadas, que deben ir acompañadas siempre del consejo médico y de un dietista nutricionista experto en este tipo de dietoterapia.

Foto de legumbres

¿Qué problema hay con las semillas en enfermedades autoinmunes?

Las semillas, como los frutos secos, las legumbres y los cereales, contienen unas sustancias que se denominan antinutrientes. La función de estas sustancias es principalmente impedir la digestión, ya que sirven como defensa de la planta, para que su semilla no sea digerida y pueda crecer.

¿Qué antinutrientes existen?

Ejemplos de antinutrientes son la antitripsina de las alubias, que impide la digestión de las proteínas. Otro ejemplo muy conocido son los oxalatos, que además de en las espinacas, también se encuentran en las semillas de sésamo, en las nueces y en el cacao.

Estos componentes son los responsables del dolor de vientre al comer muchos frutos secos, o de los gases que produce un buen plato de alubias.

¿Por qué nunca se mencionan los antinutrientes?

Normalmente, al hablar nutricionalmente de los alimentos nunca se da importancia a los antinutrientes porque estos no se encuentran en cantidades suficientes en la dieta como para producir deficiencias nutricionales.

Además, otro dato importante, es que la mayoría de antinutrientes se eliminan durante la cocción o preparación de las semillas, por ejemplo, al tostar las semillas, o con la cocción de los cereales y legumbres.

Pero existen algunas semillas, no todas, que presentan un alto contenido en antinutrientes y deberían evitarse, porque, además de dificultar la digestión, pueden acarrear problemas digestivos, especialmente cuando ya existe algún problema intestinal.

El tratamiento para mejorar la digestibilidad de las semillas es el siguiente:

Primer paso: remojo largo

El primer paso es sumergir las semillas en abundante agua y dejarlas en remojo durante unas horas, preferiblemente durante toda la noche (incluidos los frutos secos). Luego se cuelan y se desecha el agua.

En este tiempo no sólo sirve para hidratar los granos (como es tradicional realizar con las legumbres), sino que se eliminan las sustancias causantes de indigestiones y se mejora su disponibilidad de vitaminas y minerales. Para poner las condiciones óptimas para este proceso, se debería poner en agua tibia (45ºC) y mantener a temperatura ambiente.

Popularmente, este proceso se conoce como activar las semillas, es decir, al hidratarse, se preparan para germinar y esto produce una serie de cambios en su composición, que mejora su digestibilidad.

Los garbanzos, lentejas y otras legumbres deben ponerse en remojo y cocer mucho tiempo. También remojar los frutos secos y cereales integrales

Cereales integrales en enfermedades autoinmunes

Normalmente, los cereales no se consumen en dietas autoinmunes. Esto no tiene relación con su contenido en antinutrientes sino que, en este caso, es debido a que muchos cereales contienen gluten o proteínas similares (prolaminas), capaces de producir reacciones inmunitarias.

Cabe mencionar que la mejora de estas enfermedades con la retirada del gluten puede deberse a muchos factores. Por ejemplo, a la retirada de productos que lo contienen (galletas, pan, bollos,…).

Si se consumen cereales, los más aconsejables son los que no contienen gluten: el arroz blanco o semi integral, mijo, o pseudocereales como la quinua, alforfón,etc.

¿No se pueden comer legumbres en enfermedades autoinmunes?

Los antinutrientes se estudian sobre todo en el grupo de las legumbres, porque son el grupo de alimentos que mayor cantidad y diversidad de antinutrientes contienen. Pero no se puede generalizar, ya que, actualmente, no todas las legumbres contienen muchos antinutrientes.

Las legumbres que presentan mayor contenido en antinutrientes son las habas, la soja y las alubias. Estos sería mejor evitarlos en enfermedades autoinmunes.

Podría probarse la tolerancia a los derivados de soja, como el tofu o el tempeh, ya que suelen contener menos antinutrientes.

Los guisantes, los garbanzos y las lentejas, aunque son legumbres, tienen pocos antinutrientes y normalmente se pueden consumir en la dieta sin problemas. Cocinar adecuadamente las semillas ayudará a que estas sean mejor digeridas y evitará que se produzcan molestias intestinales. Se recomienda un remojo previo de un par de días, con agua tibia, para que sean más digestivos.

*Más información: Antinutrientes de las legumbres

Cómo preparar los cereales y legumbres para la dieta de enfermedades autoinmunes

En el caso de legumbres y cereales integrales (mijo, arroz,…):

– Lavar los granos para retirar el polvo o restos de impurezas. Si se consumen cereales integrales, se recomienda lavarlos con abundante agua y, si es posible, mejor comprar los «semi integrales», que tienen algo más de refinamiento que el integral. Se recomienda el semiintegral porque los cereales en la cascarilla presentan restos de pesticidas y productos fitosanitarios.

También se debe seguir el mismo procedimiento con la quinua y el amaranto, dos pseudocereales con una gran cantidad de saponinas (remojo largo y cocción adecuada).

– Remojo previo (preferiblemente toda la noche) para mejorar la digestibilidad de los nutrientes de los granos y disminuir antinutrientes

– Cocinar el tiempo suficiente hasta que queden bien cocidos (que no queden duros).

¿Comer legumbres produce molestias y reacciones autoinmunitarias?

Es posible que incluso siguiendo las indicaciones anteriores, en algunos casos las alubias, habas y la soja sientan mal o produzcan molestias o reacciones gastrointestinales porque son legumbres que tienen muchos antinutrientes.

Por este motivo, en determinados casos, algunos expertos recomiendan retirar estos granos temporalmente. En eso caso deberán potenciarse otros alimentos energéticos que no sean granos, como los tubérculos y raíces: patatas, yuca, zanahorias, moniatos, plátano macho o verde,etc.

Los granos se reintroducirán lentamente y por separado para valorar cuáles sientan bien y cuáles deben evitarse (A valorar por el médico y el dietista nutricionista)

Frutos secos en enfermedades autoinmunes

Los frutos secos son muy nutritivos y se pueden comeren enfermedades autoinmunes, pero es importante hacerles un tratamiento previo para mejorar su digestibilidad. Es decir, eliminar su contenido en antinutrientes (lecitinas, fitatos, inhibidores de proteasas,etc.).

Foto de almendras

Cómo preparar los frutos secos y semillas para la dieta de enfermedades autoinmunes

En el caso de los frutos secos y semillas:

– Lavarlos para retirar el polvo o restos de impurezas

– Remojo previo (preferiblemente toda la noche) para mejorar su digestibilidad y eliminar antinutrientes

– Servir

Otra opción es tostar los frutos secos y semillas para destruir sus antinutrientes (no freír ni añadirles sal).

Moderación con el consumo de cacahuetes, pistachos y nueces de Brasil debido a que son uno de los alimentos más ricos en aflatoxinas (estas no se pueden eliminar).

*Más información:

– Dieta para enfermedades autoinmunes

– Alimentos prohibidos en enfermedades autoinmunes

– Antinutrientes de las semillas

– Tratamiento natural de las enfermedades autoinmunes

– Leche y lácteos en enfermedades intestinales

– Avena y enfermedades autoinmunes

– Cómo eliminar antinutrientes de los alimentos

Más información sobre enfermedades autoinmunes.

Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

20 agosto, 2024