Componentes de la dieta mediterránea

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1 Características de la dieta mediterránea

Características de la dieta mediterránea

¿Qué es la dieta mediterránea?

La dieta mediterránea es una forma de alimentarse que incluye determinados alimentos y un estilo de vida que comparten los pueblos de las regiones mediterráneas. Todos los 16 países conforman la costa mediterránea se alimentan de manera similar, aunque pueden adoptar algunos rasgos diferentes en función de su región y cultura.

¿De qué alimentos se compone la dieta mediterránea?

La dieta mediterránea se compone de los siguientes alimentos:

Foto de aceite de oliva, el principal emblema de la dieta mediterránea, además de las hierbas aromáticas y la abundancia de frutas y verduras

Abundante presencia de alimentos vegetales: al día se consumen al menos 5 raciones de fruta y verdura, que son el principal componente de la dieta.
En cada comida, el plato principal serán los cereales o las legumbres, como las lentejas, los garbanzos o el arroz. Se puede acompañar con pan, que es mejor que sea fermentado, no industrial.
Las legumbres se consumen con frecuencia, por lo menos dos veces a la semana, debido a los beneficios de las proteínas vegetales, de la fibra soluble y de los minerales que contienen.
Aceite de oliva para cocinar y aliñar: el aceite de oliva es el principal condimento graso que se utiliza en la cocina mediterránea. Con este tipo de grasa se elabora el sofrito tradicional, con ajo, cebolla y hierbas aromáticas.
Consumo de frutos secos (postres de músico, un puñado de avellanas para merendar, etc.)
Estilo de vida mediterráneo: se llama así a un estilo de vida físicamente activo, que incluye caminar al menos 1 hora al día.

*Información relacionada: ¿De donde vienen los alimentos de la dieta Mediterránea?

¿Qué alimentos de origen animal tiene la dieta mediterránea?

Boquerones y sardinas, pescado graso muy rico en omega 3

Pescado: es la principal fuente de proteína animal. Se consume pescado blanco y pescado graso o azul, alternando su consumo durante la semana. El pescado puede ser fresco o en salazón, como el bacalao.
Huevo: es muy saludable (rico en proteínas y uno de los alimentos más ricos en colina) y se ha demostrado falsa la creencia de que sube el colesterol.
Lácteos: los lácteos que tiene la dieta mediterránea son aquellos naturalmente bajos en grasa (no desnatados industriales), como la leche y el yogur, el queso fresco o la mozzarella. Los quesos grasos se consumen en menor frecuencia.
La carne está menos presente en la dieta y se consume la carne blanca, de pollo, conejo o pavo. Las carnes rojas, como la carne de cerdo, ternera y de cordero es menos frecuente.