Contenidos
Efectos tóxicos de las aflatoxinas para el organismo
TOXICIDAD DE LAS AFLATOXINAS
Aflatoxinas, tóxicos de los alimentos
Las aflatoxinas son unas sustancias tóxicas que se encuentran en los alimentos. Son producidas por hongos que crecen en estos alimentos durante su procesado y almacenamiento, llamados hongos o mohos toxigénicos, que producen micotoxinas, como las aflatoxinas.
Los cacahuetes, por ejemplo, son propicios a desarrollar Aspergillus que producen aflatoxinas.
Las aflatoxinas han demostrado ser muy dañinas para la salud, tanto en personas como animales. Tienen efectos tóxicos sobre el sistema nervioso e inmunológico y desempeñan un papel importante en el desarrollo del cáncer de hígado.
Foto de especias en un mercado. La humedad ambiental y el calor favorecen el crecimiento de los hongos que producen aflatoxinas |
¿Por qué resultan tóxicas las aflatoxinas?
Las aflatoxinas son sustancias no proteicas de tamaño muy pequeño, mucho menor que las toxinas producidas por las bacterias.
Por ello resultan difíciles de detectar en los alimentos con análisis convencionales, que requieren de cultivos especiales donde no puedan desarrollarse bacterias.
También son compuestos tan pequeños y característicos, que resultan muy difíciles de detectar por nuestro sistema inmunológico.
Todo ello hace que seamos más vulnerables a sus efectos dañinos.
Toxicidad de las aflatoxinas
La toxicidad de las aflatoxinas puede afectar tanto a humanos como a animales alimentados con alimentos que contengan estos tóxicos. Los principales daños que producen son:
- Enfermedades infecciosas: las aflatoxinas suprimen la inmunidad del organismo interfiriendo en la producción de anticuerpos e incrementando el riesgo de padecer infecciones. Este es el principal peligro de estas sustancias.
- Enfermedades del hígado: en altas dosis o a largo plazo, las aflatoxinas pueden producir daño hepático, cirrosis y cáncer de hígado. Las personas con hepatitis o enfermedades hepáticas deberían evitar los alimentos con más aflatoxinas.
Se recomienda que las personas con enfermedades hepáticas eviten tomar los alimentos que suelen presentar niveles más altos de aflatoxinas, como cacahuete (maní), pistachos y nueces del Brasil
Intoxicación aguda por aflatoxinas
La intoxicación por aflatoxinas puede ser aguda o crónica. La intoxicación aguda o aflatoxicosis aguda se produce tras ingerir alimentos que presentan niveles medios o muy elevados de aflatoxinas.
Los principales síntomas de intoxicación son: hemorragias, dolor en el costado, dolor abdominal, vientre hinchado, daños hepáticos, edema, malabsorción de los alimentos incluso la muerte.
Intoxicación crónica por aflatoxinas
La intoxicación crónica por aflatoxinas o aflatoxicosis crónica se produce por el consumo frecuente de alimentos con niveles bajos o muy bajos de aflatoxinas.
Los síntomas de intoxicación son difíciles de determinar. Entre ellos parece existir un deterioro de la función intestinal en la absorción de los alimentos, metabolismo, retraso del crecimiento en niños, etc.
Los síntomas más tóxicos por la exposición continuada a las aflatoxinas se producen en personas vulnerables, con hepatitis, cirrosis o problemas hepáticos. En estos casos, las aflatoxinas pueden ser potencialmente tóxicas y multiplicar el riesgo de cáncer de hígado.
Por este motivo, las personas con enfermedades hepáticas deberían evitar la ingestión de aquellos que suelen presentar niveles más altos de aflatoxinas, como cacahuete (maní), la crema de maní, los pistachos, las nueces del Brasil y quesos.
También se recomienda extremar la higiene en la conservación de los alimentos para que los niveles de aflatoxinas no aumenten en los alimentos durante su almacenamiento.
*Más información:
– Prevención de las aflatoxinas
– Alimentos ricos en aflatoxinas
Más información sobre tóxicos en los alimentos.
15 julio, 2021