Contenidos
- 1 Condiciones en que deben guardarse las semillas
- 1.1 Importancia de la buena conservación de las semillas
- 1.2 ¿A qué temperatura deben guardarse las semillas?
- 1.3 ¿Cómo evitar que las semillas tengan hongos o microorganismos?
- 1.4 ¿En qué tipo de envase se deben guardar las semillas?
- 1.5 Importancia de la humedad y la temperatura en la conservación de las semillas
- 1.6 ¿Cómo conocer el grado de humedad? Soluciones para cambiar la humedad y la temperatura
- 1.7 Importancia del deshumidificador o humidificador en la conservación de las semillas
Condiciones en que deben guardarse las semillas
Importancia de la buena conservación de las semillas
Las semillas deben ser frescas, lo que implica que no deben haber superado el periodo habitual de germinación. Cuando compramos semillas, debemos mirar en el envase cuando termina la fecha garantizada para poder plantarse. Muchas semillas pueden germinar bastante tiempo después de esta fecha de caducidad, sin embargo, para asegurar un germinado ideal no debería guardarse más tiempo que el aconsejado por el vendedor.
El poder germinativo de las semillas depende mucho del estado en que estas se encuentran antes de sembrarse. En caso de producir nuestras propias semillas, deberíamos consultar estos datos previamente.
Las semillas deben guardarse en un lugar adecuado que garantiza su periodo de latencia. Se denomina periodo de latencia el tiempo en que la semilla permanece deshidratada. Un periodo de latencia adecuado es necesario para que la semilla pueda volverse a hidratar y pueda iniciar el proceso de germinación.
¿A qué temperatura deben guardarse las semillas?
En general, la temperatura donde se guardan todas las semillas debe ser fresca, el ambiente seco y con la menor luz posible. Una temperatura elevada y la presencia de un cierto grado de humedad superior al adecuado para mantener su periodo de latencia pueden desencadenar la germinación en el momento o en el lugar no adecuado.
¿Cómo evitar que las semillas tengan hongos o microorganismos?
Es importante que las semillas estén libres de hongos o microorganismos. Para ello, en las grandes plantaciones, cuando se guardan las semillas, se tratan con insecticidas o fungicidas.
En caso de cultivos biológicos se puede recurrir a insecticidas naturales. Algunos de ellos se pueden elaborar en casa, utilizando hierbas medicinales con propiedades para repeler o eliminar a los insectos.
Otras veces se puede recurrir a productos industriales que tienen como base componentes derivados directamente de plantas. Aunque no son completamente inocuos su toxicidad es mucho menor. Entre todos ellos, el que más se utiliza es el Bioneem, un insecticida – nematicida que contiene Azadiractina, un producto obtenido del nim o lila de la India (Melia azadirachta). Este producto actúa sobre el metabolismo de los insectos a los cuales les impide crecer y reproducirse. De momento se considera unos de los insecticidas más seguros.
¿En qué tipo de envase se deben guardar las semillas?
El envase donde deben guardarse las semillas debe ser el adecuado para garantizar que estas tengan la humedad adecuada. Así, por ejemplo, los envases de plástico aíslan mucho las semillas de la humedad y no serían demasiado recomendables en lugares donde la humedad relativa del aire es muy baja.
Por otra parte, en lugares demasiado húmedos y con temperaturas elevadas, envasar las semillas en papel podría ser contraproducente ya que este material es el que absorbe demasiada humedad.
Importancia de la humedad y la temperatura en la conservación de las semillas
El grado de humedad en que deben guardarse las semillas depende tanto de la humedad relativa del aire como de la temperatura. En general cuando la temperatura es más elevada se requiere una humedad menor y en lugares más fríos se requerirá una humedad más elevada. El cuadro siguiente muestra el grado de humedad y temperatura ideales en que deben guardarse algunas semillas.
Humedad adecuada para una conservación ideal durante 1 año a diferentes temperaturas | |||
Tipo de cultivo | Temperaturas | ||
4-10 ºC | 21ºC | 27 ºC | |
Apio | 13 | 9 | 7 |
Calabaza | 11 | 9 | 8 |
Espinaca | 13 | 11 | 9 |
Judía | 15 | 11 | 8 |
Lechuga | 10 | 7 | 5 |
Pepino | 10 | 9 | 7 |
Pimiento | 10 | 9 | 7 |
Remolacha | 14 | 11 | 9 |
Tomate | 13 | 11 | 9 |
Zanahoria | 13 | 9 | 7 |
¿Cómo conocer el grado de humedad? Soluciones para cambiar la humedad y la temperatura
Para conocer el grado de humedad a la que van estar guardadas las semillas se debe instalar en la estancia donde se encuentran almacenadas un dispositivo que mide el grado de humedad ambiental, denominado higrómetro. Se pueden adquirir diferentes tipos de higrómetros.
Algunos de ellos son digitales y poseen funciones muy sofisticadas. Sin embargo puede servir uno más sencillo de carácter analógico. Estos tienen la forma de reloj y pueden medir al mismo tiempo la humedad ambiental y la temperatura, que son los dos datos básicos que tendremos en cuenta a la hora de almacenar las semillas.
Con respecto a la temperatura basta instalar un simple método de calefacción o de refrigeración para aumentar o disminuirla a los grados que consideramos oportunos.
Importancia del deshumidificador o humidificador en la conservación de las semillas
Si el grado de humedad de la habitación o estancia es muy elevado y, al mismo tiempo, la temperatura es elevada se puede producir una pérdida elevada de la capacidad germinativa de las semillas.
Cuando se dispone de una producción elevada de semillas o si se pretende obtener un benefició económico de la producción de semillas será conveniente instalar un deshumidificador. Los deshumidificadores son aparatos que conectados a la corriente eléctrica son capaces de disminuir la humedad ambiental.
La capacidad germinativa de la semilla también puede verse alterada por un ambiente demasiado seco. En este caso, tendremos que instalar un humidificador, que es un aparato que eleva el grado de humedad ambiental.
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19 julio, 2024