El cultivo de los puerros

¿Cómo cultivar puerros?

Características de los puerros

El puerro es una planta planta bienal de la familia de las liliáceas, a la que pertenecen otras hortalizas tan características como las cebollas (Allium cepa) o los ajos (Allium sativum).

Origen de los puerros

Procedentes de Extremo Oriente, los puerros se han cultivado desde la antigüedad. Existen referencias de su cultivo en el antiguo Egipto, aunque su uso se extendió entre los griegos y, especialmente, entre los romanos que apreciaban mucho esta verdura. Se sabe de la gran afición de Nerón hacia este alimento, hasta el punto de que, según John Gerard, se le conocía como Porrophagus, es decir «el que come puerros».

En estado natural, los puerros silvestres (Allium ampeloprasum) pueden medir entre medio metro y un metro de altura.

Sus tallos son erectos y proceden de un bulbo no demasiado engrosado, de forma más bien alargada. Hojas en roseta de color verde oscuro.

Flores rosadas o blancas, en umbelas redondeadas. Cuando no han madurado se encuentran rodeadas de una espata papirácea culminada en una especie de filamento. Esta cobertura o capucha que cubre las flores inmaduras, posteriormente se abre y deja libres las flores quedando situada a un lado de la inflorescencia. Frutos tipo cápsula.

Puerros cultivados y puerros silvestres

Los puerros cultivados (Allium ampeloprasum L. var. porrum) proceden del los puerros silvestres y se caracterizan principalmente por poseer un bulbo muy pequeño y las hojas muy unidas en la base formando falsos tallos engrosados.

El sabor de los mismos es más fino que el de los silvestres, que también resultan comestibles.

Se encuentran en todas las zonas templadas, creciendo libremente al borde de campos, en caminos o entre pastos, floreciendo desde mitad de primavera a principios de verano.

Tipos y variedades de puerros:

• Según la época de cultivo: Aunque se trata de una planta bienal, se cultiva como planta anual. Tenemos tres tipos de puerros según la época de recolección:
• Puerros de primavera: son aquellos que se siembran a finales de verano, durante el mes de septiembre y se recogen en primavera, durante los meses de abril y mayo. Entre las variedades más tempranas destaca «Early Market».
• Puerros de verano: son aquellos que se siembran en invierno, durante los meses de enero a marzo para recogerse desde la primavera al verano, durante los meses de mayo a junio. Este tipo de puerros son los que presenta un mejor sabor y un mejor aroma.

• Puerros de invierno: son los que se siembran en primavera, durante los meses de abril a mayo y se recogen durante el invierno, entre los meses de noviembre y marzo. Entre las variedades de invierno destaca por su gran resistencia al frío la variedad «Winter crop».
• Según la longitud de los mismos distinguidos entre dos tipos de variedades:
• Variedades largas: Entre las principales tenemos las variedades Helvetia, Largo de Mezieres, Large American Flag, Alaska o largo de Gennevilliers.
• Variedades semilargas: Algunas tan conocidas como Verde Niza, Malabare, Elephant, Grueso de Rouen, Ártico o Birlette.

Riego y humedad de los puerros

Los puerros no necesitan un riego especial. En sitios donde llueve de una manera regular no necesitan ningún riego adicional, precisando un riego moderado en lugares secos.

La humedad excesiva y, sobre todo, el encharcamiento resultan muy perjudiciales, produciendo podredumbre de las raíces y otras enfermedades de hongos como el mildiu y la roya.

Usos de los puerros

Los puerros se utilizan principalmente como verduras u hortalizas. De los puerros se comen los tallos, que en realidad, no son tallos propiamente sino la base de las hojas que se encuentran muy apelmazadas.

Pueden comerse crudos en ensaladas, en sopas o se pueden realizar pasteles o tartas con los mismos. Los puerros combinan muy bien con otras hortalizas, especialmente con los apios, en la elaboración de caldos de verduras. Se pueden conseguir en el mercado frescos o congelados.

Los puerros constituyen un alimento muy sano, ricos en azufre y mucílagos, con grandes propiedades alimentarias y medicinales por lo que deberían figurar habitualmente en nuestra dieta saludable.

Ambiente y exposición de los puerros

Los puerros son muy resistentes a las condiciones ambientales. Toleran muy bien el frío, aunque prefieren los climas templados, siendo la temperatura óptima la situada entre los 15 y los 22ºC.

Suelo y abonado de los puerros

Los puerros prefieren los suelos poco compactos, con abundante materia orgánica y con un buen drenaje. Su pH ideal oscile entre 6.5 y 7.5

Los puerros soportan muchos tipos de suelos, sin embargo no pueden tolerar aquellos en que se produce encharcamiento, por ello no es conveniente plantarlos en suelos arcillosos que son proclives a retener demasiada humedad, sobre todo en invierno. Tampoco toleran los suelos salinos.

Para poder desarrollarse bien los puerros necesitan mucha materia orgánica. Es conveniente incorporar estiércol o compost en la preparación del terreno antes de la plantación, la cual se llevará a cabo durante el verano u otoño.

La preparación del terreno es necesaria tanto para la adición de materia orgánica como para realizar los agujeros necesarios para que los puerros puedan ser enterrados y consigan el blanqueado adecuado para que puedan venderse o comerse adecuadamente.

Lo ideal sería remover la tierra hasta una profundidad mínima de unos 30 cm, que es la profundidad que se necesita para enterrarlos durante el verano y el otoño. En caso de plantarlos en llano, como veremos posteriormente, también se necesitará la tierra para poder aporcarlos, por lo que la tarea previa de removido de la tierra a una buena profundidad es necesaria antes de realizar la plantación.

Cómo preparar el terreno para cultivar puerros

Cuando se realiza la tarea de preparación del terreno es cuando se debe añadir estiércol o compost. Lo ideal es añadir unos tres o cuatro dedos de compost bien maduro o de estiércol que deberá permanecer debajo de la tierra a unos 25 o 30 cm. (Unos 180 kg por 100 m2). Tampoco se debe exagerar en la adición de materia orgánica, puesto que una cantidad excesiva de la misma puede favorecer un desarrollo demasiado elevado de la planta que le impedirá mantenerse en pie.

Además del abono orgánico añadido durante la preparación del terreno, es importante añadir abono compuesto unos 15 días antes de la plantación.

• Rotación del suelo: Es importante no cultivar puerros en el mismo suelo hasta que no hayan pasado de nuevo cuatro años.
• Rotación de cultivos: No deberán plantarse puerros en suelo donde anteriormente se hayan plantado coles o patatas. Sin embargo, resulta muy adecuado asociarla con acelgas, zanahorias, remolachas, lechugas cebollas o hinojos.

Siembra y plantación de los puerros

El periodo de plantación y cosecha de los puerros suele durar entre 5 y 6 meses. Dependiendo del momento en que queramos recogerlos deberá realizarse la siembra y la plantación.

¿Cómo sembrar los puerros?

Si deseamos obtener puerros tempranos, es necesario realizar la siembra durante los meses de invierno. Para ello debemos plantar las semillas a finales de enero en invernadero en un semillero caliente a una temperatura de unos 13ºC (Las semillas de los puerros solamente pueden germinar con una temperatura mínima de 7ºC).

Cuando las semillas hayan germinado y las plántulas puedan mantenerse erguidas, se trasplantarán en bandejas a una distancia unas de otras de unos cuatro dedos. Las bandejas deben mantenerse en el invernadero a la misma temperatura hasta el mes de marzo.

Llegado marzo, las bandejas se colocarán en una cajonera fría a fin de que se acostumbren a más bajas temperaturas previo a la faena de plantación. A finales de abril se pueden plantar al exterior.

Si queremos obtener puerros para el invierno, la plantación deberá realizarse durante el mes de abril al exterior. Para ello colocaremos las semillas en surcos a un dedo de profundidad. los surcos deberán mantener un palmo de distancia, más o menos, uno de otro. Al llegar el mes de mayo, se realizará el aclarado de las las plántulas dejando una distancia de unos 3 cm entre una y otra. La plantación se llevara a cabo a finales de mayo o durante el mes de junio.

¿Cómo plantar los puerros? Aporcado de los puerros

Independientemente de la época de sembrado, la plantación se realizará cuando las plantas tengan unos 20 cm de altura y un diámetro aproximado de 1 cm. Las plantas se colocarán a una distancia de unos 20 cm una de otra, alineadas en surcos separados unos 80 cm. Manteniendo esta distribución, la plantación puede llevarse a cabo de dos maneras diferentes, dependiendo de la profundidad de plantado:

• Plantación en agujeros: Se utilizará un plantador para realizar agujeros de un palmo de profundidad y unos cuatro dedos de anchura. Dentro del mismo se introducirá la planta y se rellenará el agujero con agua, sin añadirle tierra. Al cabo de unos días, cuando las plantas hayan arraigado, se añadirá tierra a los tallos para cubrir los agujeros y sujetar la tierra. De esta manera, los tallos van creciendo dentro de los agujeros y se produce el blanqueado de los mismos al no alcanzarles la luz exterior. Si se desea alargar la blancura de los tallos puede añadirse tierra a los mismos a medida que estos van aumentando de altura. Este proceso se conoce como aporcado.
• Plantación en llano: La plantación se lleva a cabo sin realizar agujeros profundos. La plántula se coloca dentro de agujeros de entre 5 y 8 cm. Posteriormente se añade tierra a su alrededor para que quede bien fijada. Con este técnica, para conseguir el blanqueado de los tallos, es necesario aporcar la planta a medida que va creciendo, es decir se va amontonando progresivamente tierra alrededor del tallo, de manera que solamente la parte superior de las hojas sobresalga de los montones.

Para conseguir una cosecha más limpia, libre de tierra, algunos productores prefieren colocar unos cilindros de cartón alrededor de la planta.

Cuidados de los puerros

Además del aporcado progresivo, las principales tareas de mantenimiento de los puerros se centra principalmente en el escardado de la tierra para mantenerla libre de malas hierbas y aireación del terreno.

En condiciones de lluvias normales, los puerros no necesitan ningún riego adicional. Solamente en tiempo seco se deberá proporcionar un riego adicional semanal a razón de tres litros de agua por cada metro de surco.

Plagas y enfermedades de los puerros

La principal plaga del puerro la constituyen las larvas del gorgojo y el escarabajo de la cebolla, que se comen las hojas produciendo grandes agujeros. Se debe vigilar la presencia de trips. Algunos gusanos pueden también atacar las raíces o los bulbos.

En condiciones adecuadas, los puerros son muy resistentes a las enfermedades. En condiciones de estancamiento de agua o demasiada humedad, pueden desarrollar algunas enfermedades fúngicas como:

• El mildiu
• La roya
• La botrytis
• La sclerotinia
• La alternaria

Recolección y conservación de los puerros

La recolección de los puerros se lleva a cabo al cabo de medio año aproximadamente después de haberlos sembrado. Esto se realiza cuando la planta se encuentra bien desarrollada y los falsos tallos hayan alcanzado una altura de unos 20 cm.

Para extraerlos del suelo se utiliza una horca. Una vez extraídos es conveniente eliminar las raíces con una podadora y cortar las puntas de las hojas. Posteriormente se juntan y se atan formando hatillos.

Conservados en lugar fresco y seco pueden aguantar hasta un par de días. Cuando se conservan adecuadamente en cámara frigorífica pueden aguantar hasta 2 o 3 meses.

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Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

21 agosto, 2024