Contenidos
Descripción de la morera
Foto de un árbol de moral. |
El moral o morera negra (Morus nigra) es un árbol originario de oriente medio que se cultiva en la región mediterránea desde tiempos muy antiguos, pues ya aparece en los tratados de Dioscórides.
Se trata de un árbol caducifolio, de copa ancha, que mide entre 5 – 10 m. de altura.
Corteza típicamente agrietada, que se utiliza en medicina natural como purgante.
Hojas acorazonadas, con dientes desiguales, ápice acuminado, de 7 a 22 cm.
Inflorescencia en amento, con flores monoicas (flores femeninas y flores masculinas en el mismo árbol).
Los frutos de la morera son las moras, también llamadas mora de árbol, infrutescencias o frutas múltiples.
Usos del moral
En muchos sitios, no se cultivaban moreras sino para alimentar al gusano de seda.
– Ornamentación: Por su copa ancha y hojas grandes, la morera proporciona una valiosa sombra los meses de verano, además de sus deliciosos frutos. De hecho, la morera no se encuentra de forma silvestre en la naturaleza, sino que siempre es cultivada por el hombre.
Andrés Laguna ya escribió, en el siglo XVI: El moral es tan amigo de conversación humana, que ni por maravilla quiere vivir en las montañas o despoblados, sino siempre en lugares frecuentados de hombres, los cuales, con su fruto agradable y sabroso, mantiene juntamente de carne y vino.
– Alimentación: Las frutas son dulces y ligeramente ácidas, muy refrescantes, y se comen crudas o cocidas, en jarabes, conservas y mermeladas.
– Usos medicinales: Se utiliza la corteza, las hojas y los frutos, incluso en algunos tratados aparece la raíz. La corteza del moral es purgativa, las hojas son diuréticas y los frutos (las moras de árbol) se utilizan para preparar un jarabe antiséptico, antiinflamatorio y astringente, utilizado contra las infecciones de la boca, anginas y catarros.
Condiciones de cultivo del moral
Foto de hojas y frutos de moral. |
La morera es un árbol resistente y vigoroso, que se encuentra tanto en terrenos de regadío como de secano.
Crece en climas templados o cálidos. En general resisten el frío, aunque depende de la especie, la morera negra es la menos resistente a las bajas temperaturas.
Es preferible ubicación soleada, y tolera mucho el viento, hasta el punto de que algunas veces se utiliza como cortavientos.
Es un árbol de crecimiento lento.
– Suelos ligeros, arcillosos, bien drenados y profundos para que puedan crecer sus raíces. Precisamente gracias a la capaciad de captación de agua de sus raíces profundas, no es necesario regar demasiado este árbol, pues en el interior de la tierra obtiene la humedad que necesita.
Siembra del moral
Las moreras obtenidas por semilla son más vigorosas y se adaptan mejor a las condiciones ambientales y son más resistentes a las enfermedades. También se pueden obtener por esqueje de un árbol adulto.
Reproducción de la morera por semilla:
Obtener la semilla de un ejemplar sano y vigoroso. Cuando los frutos estén suficientemente maduros (que caigan al suelo con una sacudida), recogerlos y secarlos al sol durante dos días. Después se sumerge el fruto entero en agua durante 1 hora y luego se estruja hasta que se separen bien las semillas de la pulpa.
Secar las semillas a la sombra durante 1 día, para después sembrar rápidamente en un semillero, protegido del sol. Se debe enterrar la semilla a muy poca profundidad, «el doble del diámetro de la semilla», es decir, espolvorear un poco de tierra fina por encima.
La tierra del semillero debe ser fina. Se recomienda escoger un sustrato rico en nutrientes y molerlo con las manos planas, de forma que se separe en tierra fina y no queden trozos compactos. Regar con spray preferiblemente, que permitirá mantener una humedad óptima para la semilla (Si se riega demasiado la semilla, es fácil que esta se pudra).
La germinación de la semilla tarda entre 2 y 3 semanas.
En invierno se trasplantan en un vivero, donde se cuidarán hasta que tengan suficiente tamaño para trasplantar en terreno definitivo. Las moreras son árboles de crecimiento lento, que se pueden cultivar en macetas durante muchos años. Colocar en el fondo de las macetas piedras volcánicas, para drenar la humedad y que la planta tenga mayor disponibilidad de oxígeno.
Trasplantar en terreno definitivo cuando mida aproximadamente 2 metros. Se recomienda cavar un hoyo grande para descompactar el terreno y favorecer el enraizamiento. Es aconsejable abonar con humus u otro fertilizante y dejar el hoyo abierto dos o tres meses antes de realizar el trasplante. Se debe mantener una distancia entre árboles de al menos 5 metros.
Los árboles tardan entre 5 y 10 años en producir frutos.
Es necesario mantener podar el árbol cada invierno. A partir de las ramas podadas se pueden hacer esquejes:
Reproducción de la morera por esquejes:
- Seleccionar esquejes de 25 – 30 cm. Se corta la parte superior inclinada, y la parte donde deberá nacer las raíces en forma plana, para no confundirnos después.
- Aplicar hormonas para que enraice y plantar en un sustrato rico en materia orgánica y fino (sin piedras ni compactaciones). Colocar en el fondo unas piedras para drenar la humedad y que la planta tenga mayor disponibilidad de oxígeno.
- Regar preferiblemente con spray, para no inundar con demasiada agua.
- Pueden tardar 6 semanas en arraigar.
Poda de la morera
Todas las podas se realizan en invierno, cuando la savia del árbol está en reposo. Hacerlo en días serenos y nunca cuando llueva (evitaremos posibles infecciones).
La primera poda de la morera se hace cuando es un abrolito de aproximadamente 2 metros. Se cortan las yemas terminales de las ramas, para que de ramifiquen y así se empiece a generar una copa ancha (poda de formación). Las podas deben permitir que en el interior del árbol haya suficiente aireación, para que sea menos susceptible a padecer enfermedades.
La morera tiene unas 6 ramas verticales no ramificadas. En invierno se poda por las yemas para que ramifiquen en dos, y resulten 8 o 12 vástagos más (Ver imagen):
Recolección de frutos
Es importante escoger los frutos maduros, pues antes de su madurez son muy amargos, pero si están pasados, sufren fermentaciones. Sus frutos están maduros a finales de primavera o principios de verano.
En textos antiguos, se dice que cada dos años, el árbol produce una cosecha más abundante que las demás, como todos los frutales. Los años de menos producción de frutos, tiene más hojas.
Antes de madurar, las moras son blancas, mientras maduran, rojas, y al fin de su madurez, son negras. Tienen un sabor dulce y ligeramente ácido, que las hace muy apetecibles y refrescantes en verano. Son ricas en calcio, vitamina C y otros antioxidantes como las antocianinas.
No se cultiva como fruta comercial debido a que el fruto es muy sensible para su transporte.
Más información sobre las propiedades del moral y de las moras de árbol.
13 junio, 2023