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Qué agua utilizar para regar
¿Cuál es la mejor agua para regar?
La mejor agua para regar las plantas es el agua de lluvia, siempre que no se viva en zonas muy contaminadas, en donde las precipitaciones puedan ser habitualmente ácidas. Si no se dan estas condiciones, se puede recoger el agua de la lluvia y guardarla en recipientes cerrados durante unos días.
¿Cómo regar con agua potable?
Si no se puede recoger el agua de la lluvia, tendremos que eliminar el cloro del agua del grifo antes de regar, siempre que sea posible. Para ello, lo mejor es llenar un cubo con agua del grifo y dejarlo durante toda la noche para que se evapore. Aceleraremos la eliminación de este componente si introducimos un aireador en el agua, como los que se venden para oxigenar el agua de los acuarios.
Otra solución es instalar un sistema de limpieza del agua por ósmosis. Este sistema, aunque sea menos económico que los anteriores, nos permitirá tener agua en casa para beber, para cocinar y para las plantas, de mucha calidad.
¿Qué son aguas duras?
No se deben utilizar aguas duras para regar ciertas plantas. La cal perjudica las plantas que necesitan suelos ácidos. Por lo tanto, la mejor solución para estas plantas será eliminar la cal del agua, siempre que ésta sea demasiado alcalina.
Conocer las necesidades de las plantas ayudará a tener un jardín más hermoso
¿Cómo medir la cal del agua?
Es decir, para saber si el agua es dura, tendremos que saber el pH del agua. Existen en el mercado una serie de kits destinados a efectuar una lectura del pH. Tendremos en cuenta que, en una escala del 0-14, el 7 representa un valor neutro; valores inferiores a 6.5 representan el valor ácido, y por encima de 7,5 son alcalinos (aguas duras o calcáreas).
Consecuencias de regar con agua demasiado dura
Si regamos con agua alcalina (aguas duras o calcáreas) alteraremos el pH del suelo. Las plantas que necesiten suelos ligeramente ácidos o ácidos no podrán vivir en ellos, ya que los vegetales no podrán absorber los minerales (cobre, manganeso, hierro, zinc y boro). Para evitar esto, tendremos que eliminar la cal del agua, a no ser que deseemos acidificar el terreno alcalino. (Con terrenos bien drenados se realiza añadiendo al terreno algún elemento acidificante como la turba. Con terrenos mal drenados es mejor añadir azufre o sulfato de hierro).
Cómo eliminar la cal del agua
Para quitar o neutralizar la cal del agua de riego podemos utilizar los siguientes procedimientos:
- Utilizar un sistema de obtención de agua descalcificada a través de osmosis inversa. Es el sistema menos económico, aunque el más recomendado en caso de poseer muchas plantas que prefieran suelos ácidos
- Utilizar algún producto ácido (vinagre o limón) para acidificar el agua. Añadir unas cuantas gotas al agua de riego.
- Añadir 2 cucharaditas de vinagre por cada 5 litros de agua. Regar las plantas que presenten un pH demasiado alto y necesiten suelos más ácidos.
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10 diciembre, 2021
