Usos tradicionales de la violeta

Aplicaciones de la violeta

Historia de la violeta – Usos tradicionales

La planta de la violeta ha sido utilizada en la medicina naturista desde tiempos muy antiguos. Los griegos la empleaban internamente como cardiotónico, para eliminar la desazón, o como depurativa en casos de gota. Externamente, realizaban preparados para el dolor de vientre o para la curación de heridas.

El etnobotánico especialista en botánica, físico y astrólogo Nicholas Cullpeper, afirma textualmente:

» Se trata de una planta agradable de Venus, de carácter leve, de ninguna manera perjudicial. Todas las violetas son frías y húmedas, mientras que son frescas y verdes, y se utilizan para enfriar cualquier cantidad de calor, o desazón del cuerpo, ya sea interna o externamente, como inflamaciones en los ojos, en la matriz o el trasero en abscesos también, e hinchazones en caliente, para beber la decocción de las hojas y flores hechas con el agua en vino, o a aplicarlos a modo de cataplasma en los lugares doloridos. De igual manera disminuye los dolores en la cabeza, causados por la falta de sueño, o cualquier otros dolores derivados del calor, cuando aplica de la misma manera, o con aceite de rosas.

Un dracma de las hojas secas o flores de violeta, pero las hojas de manera más más fuerte, hacen purgar el cuerpo de los humores coléricos y favorecen la curación, cuando se toman con un trago de vino, o cualquier otra bebida, el polvo de las hojas de color púrpura de las flores, sólo recogidas y secadas y bebidas en agua, se dice que ayudan con la amigdalitis, y la epilepsia en los niños, especialmente en el comienzo de la enfermedad.

Las flores de las violetas blancas maduran y disuelven las inflamaciones. La hierba o las flores, mientras que son frescas, o las flores cuando están secas, son eficaces en la pleuresía, y todas las enfermedades de los pulmones, a disminuir la dureza de las gripes calientes, y la ronquera de la garganta, el calor también, y la nitidez de la orina, y todos los dolores de la espalda o riñones, y la vejiga.

Es buena también para el hígado y la ictericia, y todas las fiebres calientes, para refrescar el calor y saciar la sed, pero el jarabe de violetas es el de más uso, y de mejor efecto, cuando se toma con algún licor conveniente, y si un poco de jugo o jarabe de limón se le añade a él, o unas gotas de aceite de vitriolo, de esta manera se convierte en el más poderoso para enfriar el calor y saciar la sed, y le da a la bebida un color de vino clarete, y un fino gusto ácido.

…. Las flores secas de violeta se contabilizan entre las bebidas cordiales, polvos y otros medicamentos, especialmente cuando el enfriamiento cordial es necesario. Las hojas verdes se utilizan con otras hierbas para hacer emplastos o cataplasmas para las inflamaciones e hinchazones, y para aliviar todos los dolores de cualquier tipo, derivados del calor, y para las almorranas también, cuando se fríen con yemas de huevos, y se aplican a las mismas».

Otros usos de la violeta

violeta flores

Además de utilizarse sobre todo las flores, en infusiones o jarabes, como remedio, también se consumen estas partes de la planta, ya que son comestibles.

*Información relacionada: Propiedades de la violeta / Violeta: usos como planta comestible

Más información sobre la violeta.

Este artículo ha sido avalado por Julián Masats - Ingeniero técnico agrícola especializado en hortofructicultura y jardinería.
Editorial
Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

2 enero, 2022

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