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Características del tábano bovino
Nombre científico: Tabanus bovinus
Nombre común: Tábano bovino
Orden: Dípteros
Familia: Tabánidos
¿Qué es el tábano?
El tábano es una mosca grande que pertenece a la familia de los tabánidos. Este insecto volador puede llegar a medir hasta 2’5 cm de longitud. Normalmente, el tábano tiene un color apagado y oscuro, aunque hay especies con líneas o manchas de color, incluso con los ojos coloreados.
En lo que se refiere, hay 3 géneros de importancia veterinaria en el mundo: Tabanus, Chrysops y Haematopota. Sin embargo, existen en total más de 3.000 especies de tábanos.
Generalmente, estos insectos parásitos son de distribución cosmopolita, es decir, que se encuentran en todo el globo. No obstante, no hay tábanos del género Haematopota ni en América ni en Australia.
Las hembras de esta clase de moscas parásitas se alimentan de sangre. Estos insectos necesitan ingerir sangre antes de poner los huevos para que puedan madurar los folículos embrionarios y para el mismo proceso de puesta de huevos. En cambio, los tábanos machos, son inofensivos, pues, en lugar de ser parásitos y comer sangre, tienen una alimentación herbívora, que se basa en polen y en néctar de las flores.
El aparato bucal del tábano está diseñado para cortar y chupar, ya que es del tipo picador-chupador y está dirigido siempre hacia abajo. Gracias a sus afiladas mandíbulas, los tábanos hembra cortan la piel para chupar la sangre. En cambio, los machos no disponen de este aparato bucal tan complejo, por lo que se tienen que alimentar de otras fuentes, ya que no pueden chupar sangre.
Es normal que, en zonas templadas, una gran población de tábanos muera en otoño, pero se produce una recuperación cuando llega la primavera y el verano, pudiendo llegar a ser plaga.
Los tábanos son una plaga del ganado doméstico.
* Más información: Características del tábano
¿Qué daños causa el tábano?
La picadura del tábano es muy dolorosa. En el campo, este insecto parásito molesta al ganado y a los caballos, causándoles gran estrés, posado normalmente en la región lumbar, cuello y patas, zonas donde el animal difícilmente puede ahuyentarlo. Por otro lado, la picadura del tábano es un foco de entrada de infecciones, como miasis, cuando las moscas ponen sus huevos en las heridas causadas por este parásito y allí se desarrollan sus larvas, alimentándose de tejido vivo.
Debido al hecho de que se alimentan de sangre, por lo que tienen que picar a los animales, estos insectos perjudiciales son vectores de una gran cantidad de microorganismos patógenos para los animales domésticos y salvajes, como el virus de la anemia infecciosa equina, los protozoos Trypanosoma vivax, Trypanosoma evansi o Anaplasma marginale, siendo también peligrosos para el ser humano. Los tábanos, con sus picaduras, también pueden transmitir, bacterias, rickettsia y gusanos filarioideos, siendo responsables de causar enfermedades como tularemia, anaplasmosis o filariosis.
Control del tábano
Los tábanos no dependen de los animales domésticos para sobrevivir, ya que son capaces de parasitar distintas especies de huéspedes, también a animales salvajes. Por ello, y por varios aspectos biológicos y ecológicos, el control de estos insectos parásitos es inviable desde el punto de vista económico y ecológico.
El uso de repelentes, como los piretroides, las trampas impregnadas en insecticidas y el confinamiento en recintos cerrados de los animales, entre otros sistemas de control de tábanos, no son medidas del todo efectivas.
Para evitar la transmisión de enfermedades debido a la picadura del tábano, conviene separar los animales domésticos enfermos de aquellos sanos.
* Información relacionada: Características de los tábanos
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22 mayo, 2024
