Alimentación de los animales rumiantes

Dieta de los rumiantes

Aparato digestivo de los rumiantes

Paja para vacas

Foto de paja para rumiantes

Los rumiantes, como la vaca, la oveja, la cabra, el bisonte o el ñu, para aprovechar la fibra vegetal han ideado unas estrategias anatómicas y conductuales, llamadas preestómagos y rumia.

Estos animales, en lugar de tener un estómago como nosotros, tienen 3 cavidades o preestómagos llamadas: panza o rumen, redecilla o retículo y libro u omaso.

Los preestómagos se sitúan entre el esófago y el estómago, también llamado cuajar o abomaso. La función de los preestómagos es la de alojar los microorganismos, principalmente el rumen, que realizarán la fermentación bacteriana.

En el rumen, hay una gran población de microorganismos (bacterias y protozoos) que se encargan de digerir la fibra vegetal para convertirla en una serie de moléculas llamadas ácidos grasos volátiles aprovechables para los rumiantes.

* Información relacionada: Alimentación del caballo / Alimentación de la vaca

¿Cómo hacen la digestión los rumiantes?

En el rumen, hay una gran población de microorganismos que están en simbiosis con los rumiantes

La hierba y las plantas tragadas sin masticar pasan a la panza, la cámara más grande. En la panza o rumen, se produce la fermentación de la fibra gracias a la ayuda de las bacterias. Además, en el rumen se producen contracciones de las paredes que suavizan el alimento.

Al acabar de comer, el material semidigerido es devuelto a la boca, cuando el rumiante empieza a masticar. La comida pasa del rumen al retículo o redecilla. Las paredes del retículo están recubiertas de relieves en forma de red. En la redecilla, el alimento es dividido en porciones y devuelto a la boca para su masticación e insalivación.

Terminadas estas operaciones, el bolo alimenticio recorre nuevamente el esófago y llega al libro u omaso. El omaso está laminado en fina láminas paralelas. El libro constituye una antecámara, desde la cual pasa el bolo alimenticio al cuajar. El cuajar o abomaso es el verdadero estómago. Aquí se segregan los jugos gástricos que somete el alimento a un tratamiento químico. El cuajar está conectado con el principio del intestino.

El bolo alimenticio no regresa al rumen porque la abertura que lleva a esta cámara tiene en su unión con el esófago dos márgenes adhesivos, permitiendo el paso únicamente a materias más voluminosas que el bolo alimenticio.

Los animales rumiantes regurgitan la comida por bocados, la mastican un buen rato, se la tragan nuevamente y la digieren. Este tipo de digestión se llama rumia.

* Ver más sobre: Pastoreo en rumiantes / Comportamiento de rumia / Animales rumiantes / Tipos de rumiantes

Más información sobre la alimentación de los animales.

Editorial
Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

22 abril, 2019

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