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Envejecimiento de los perros
¿Cuándo un perro es viejo?
Se dice que un perro es viejo cuando tiene una edad comprendida entre los 6 y los 12 años. Ésta es una franja de tiempo bastante grande porque el envejecimiento en el perro depende de su tamaño, pero también de la raza. De este modo, los perros más grandes envejecen más rápidamente.
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Como ejemplo de ello, un Mastín de los Pirineos es viejo a los 7 u 8 años de edad, mientras que un Yorkshire Terrier o un Maltés se consideran viejos cuando tienen unos 12 años de vida. Los perros más puros, es decir, menos cruzados también envejecen con mayor rapidez. Por lo tanto, un perro de raza vivirá a priori menos años que un perro mestizo.
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¿Qué problemas sufren los perros viejos?
Entre las principales causas que producen el envejecimiento de los perros, podemos mencionar las siguientes:
– Enfermedades: Los problemas de salud y las enfermedades aumentan con la edad y modifican la conducta del animal. Por ejemplo, es habitual que con la edad se den casos de artritis o artrosis, enfermedades que dificultan el movimiento.
Los tumores también son más habituales con la edad y estos pueden causar una pérdida del apetito. Además, los animales viejos pueden sufrir dolores que aumentan su irritabilidad y le disminuyen la capacidad de movimientos.
– Cambios en la jerarquía: Entre perros que conviven juntos, puede producirse una desestabilización de la jerarquía cuando el individuo dominante envejece.
Los perros por sí solos vuelven a restablecer la jerarquía luchando. El problema está cuando el dueño de los perros, con intenciones conciliadoras, vuelve a inestabilizar la jerarquía de sus animales tratando como dominante con sus mimos y cuidados cada día a un perro distinto. Para que se mantenga el equilibrio de la jerarquía el dueño de varios perros debe mimar más al dominante.
Por estos motivos, aunque suene muy cruel, si tenemos varios perros, nuestro perro viejo no puede ser tratado con el mismo afecto que el perro más joven dominante.
– Síndrome de disfunción cognitiva (SDC): Los perros pueden padecer con la edad un problema muy serio llamado síndrome de disfunción cognitiva (SDC). El síndrome de disfunción cognitiva es el conjunto de síntomas que dificultan la cognición, es decir, la memoria y el aprendizaje. El síndrome de disfunción cognitiva es el equivalente humano del alzheimer. Tiene como consecuencias que el animal se desorienta, se le altera el ritmo de sueño y vigilia, hay una pérdida de hábitos (como la micción inadecuada) y disminuye la interacción entre el perro y su dueño.
Esta enfermedad se diagnostica mediante la observación e identificación de los cambios de comportamiento. No tiene cura y el tratamiento del síndrome de disfunción cognitiva sólo es de tipo paliativo. Se le pueden dar medicamentos para mejorar los procesos cognitivos como la nicergolina o la selegilina o piensos con sustancias antioxidantes con el objetivo de impedir el empeoramiento de la enfermedad.
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7 junio, 2021
