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¿De qué se alimentan las palomas?
Alimentación de la paloma
Foto de paloma urbana. En las ciudades, las palomas son omnívoras
Las palomas son aves herbívoras granívoras, pero también comen, además de granos, frutos e invertebrados.
Debido a su carácter oportunista, las palomas tienen un régimen alimenticio muy variado en la actualidad. En la naturaleza, se alimentan de semillas silvestres y cultivadas, pero en las ciudades también comen restos de comida, ya que en esta situación se han vuelto omnívoras.
Las crías de paloma, llamadas pichones, se alimentan de una sustancia alimenticia secretada por el buche de sus progenitores llamada leche de buche.
¿Qué comen las palomas en estado salvaje?
En la naturaleza, estas aves comen sobre todo semillas, ya que se trata de animales herbívoros granívoros.
Las palomas se alimentan de granos de cereales y de plantas ruderales, como cenizos (Chenopodium sp.), polígonos (Polygonum), Stellaria, romaza (Rumex scutatus). En algunas ocasiones también ingieren invertebrados como caracoles y otros moluscos, hojas y hasta frutos.
¿Qué comen las palomas en los pueblos?
En zonas rurales las palomas se alimentan de diferentes semillas, como trigo, cebada, maíz o avena, y también frutos, tales como cerezas, semillas de olmo, semillas de hiedra.. pero en menores cantidades.
¿De qué se alimentan las palomas en las ciudades?
En medio urbano, estos animales comen todo tipo de material comestible, que les ofrecen las personas o que se encuentra en forma de basura, como trozos de pan, palomitas y hasta trocitos de carne o productos de charcutería, porque se trata de animales oportunistas, como lo son también las gaviotas y las ratas.
Las palomas urbanas también visitan las zonas ajardinadas en las que hay césped para comer las semillas de las hierbas altas.
¿Qué pueden comer las palomas en cautividad?
Las palomas domésticas se alimentan con una mezcla de semillas
Las palomas domésticas suelen ser alimentadas con una mezcla de semillas de cereales y legumbres, que contienen mijo, soja, guisantes, avena…
A esta dieta base se les da también diferentes verduras y grit de minerales y calcio. Se las puede suministrar vitaminas en el agua.
Comportamiento alimenticio de las palomas
Las palomas salvajes suelen comer en el suelo en campo abierto, hasta el punto de que depende de medios abiertos para su alimentación, como campos de cultivo, praderas y zonas de césped.
En estado salvaje, las palomas salen en búsqueda de alimento de buena mañana y por la tarde.
Las palomas urbanas han adaptado su dieta a la vida en la ciudad, pasando de una alimentación herbívora granívora a una dieta omnívora. Para encontrar comida, no acostumbran a abandonar la ciudad y visitan sus calles y parques. Sin embargo, también pueden visitar los campos y las zonas agrícolas de los alrededores si las condiciones lo exigen, como la falta de alimento o una gran competencia a nivel urbano.
La distancia que recorre cada una de estas aves diariamente para ir a comer va desde los 25 km, como sucede muy raramente, hasta los pocos cientos de metros, que se da en muchas ocasiones.
Curiosidades sobre las palomas
Las palomas urbanas son susceptiles a enfermar.
Aunque las palomas salvajes tienen un patrón de alimentación marcado y comen a unas determinadas horas, las palomas urbanas y las de los pueblos se han adaptado a comer en función de los horarios de actividad de los seres humanos.
Frente a una gran competencia por el alimento, la paloma adopta una actitud agresiva entre los miembros de su propia especie para defender su comida.
Los pichones son los individuos más sensibles a las enfermedades debido a la falta de alimento.
En las ciudades, las palomas tienen una alimentación muy diferente a la que tenían en su origen en estado salvaje y se alimentan de restos de comida tan dispares como jamón York o palomitas con azúcar. Las consecuencias de este cambio en su salud no están bien estudiadas. La dependencia de este ave al ser humano para encontrar alimento está bien clara. Los aportes de alimento vía humana son fundamentales para la supervivencia y reproducción de esta especie.
En la ciudad, estos animales han adoptado una auténtica estrategia de mendicidad, a base de dar vueltas con su cuello y efectuar previamente múltiples piruetas alrededor de la persona que ya conocen como alimentadora.
Se tiene la certeza que las palomas urbanas pueden infectarse por salmonela u otros gérmenes potencialmente causantes de enfermedades, como Campylobacter, tras ingerir carne poco cocida, leche cruda, agua contaminada. Lo que más provoca la aparición de enfermedades entre estas aves son las grandes bandadas que se forman para acudir a los lugares de alimentación, en calles, plazas y parques, cuando hay personas actuando de alimentadoras.
Las palomas hembra necesitan tomar una dieta más rica en proteínas y calcio durante la época de reproducción para disponer de los elementos nutricionales necesarios para la correcta formación de los huevos.
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30 octubre, 2022
