Toxemia de preñez de la oveja
Toxemia de gestación de la oveja
La oveja puede sufrir un trastorno metábolico llamada toxemia de gestación. Se produce porque hay, literalmente, una intoxicación de la sangre por unas sustancias llamadas cuerpos cetónicos o cetonas.
Los cuerpos cetónicos se forman gracias al hígado cuando hay una falta de glucosa y se tienen que utilizar las grasas en su lugar. La falta de glucosa se debe a que la oveja gestante ha perdido el apetito por el llenado del rumen y el aumento de estrógenos y a que debe desviar mucha glucosa al feto.
Es el conjunto de situaciones adicionales de consumo de glucosa como tener varios fetos, alimentarse de forraje fibroso, ejercicio físico intenso o estrés lo que desencadenan esta enfermedad.
Entre los rumiantes la toxemia de la gestación es una enfermedad casi exclusiva de la oveja. En otros rumiantes, como la vaca, no se da la toxemia de la gestación porque los partos dobles son muy infrecuentes. En la cabra, tampoco es habitual este problema porque este animal aborta con gran facilidad.
La toxemia de la gestación ovina es muy difícil de tratar. La inyección de glucosa no funciona y hacer abortar al animal, no siempre va bien.
Más información sobre los animales.
5 febrero, 2020