Contenidos
¿Piensan los insectos?
¿Los insectos son capaces de aprender?
El comportamiento de los insectos es relativamente instintivo, como lo demuestra el hecho de que las mantis religiosas criadas en cautividad reaccionan del mismo modo a los estímulos que las que viven en libertad.
Sin embargo, se sabe que los insectos son capaces de aprender. Así por ejemplo, las abejas melíferas son capaces de recordar donde tenían su colmena si ha sido movida, incluso si ha pasado más de 10 días de ello.
Los insectos tienen sistema nervioso para coordinar la información
Cualquier animal, para tomar una decisión, necesita de algún tipo de sistema de comunicación interno que pueda organizar, gestionar y sincronizar la información que le llega del exterior y dar las respuestas adecuadas para cada caso. Como en el caso de otros organismos relativamente complejos, los insectos tienen 2 sistemas de comunicación internos: el sistema nervioso y el sistema endocrino, que forma parte de la regulación humoral.
¿Cómo funciona el cerebro de los insectos?
|
El sistema nervioso, de tipo electroquímico, reacciona con los impulsos de las células especializadas llamadas neuronas. Los mensajes de este sistema son específicos debido a la naturaleza de las vías de transmisión y no por la naturaleza de dichos mensajes, ya que todos los mensajes son producidos por el mismo tipo de fenómeno fisicoquímico.En el sistema endocrino, los mensajes se codifican mediante sustancias específicas, llamadas hormonas, producidas y liberadas por células específicas en los órganos llamados glándulas endocrinas. Las hormonas cuando viajan por el cuerpo solo actúan en unas determinadas células sensitivas, aunque muchas células están expuestas, porque se transportan por la sangre.
Ambos sistemas son importantes en los insectos para que lleven a cabo todas sus conductas naturales y cada uno tiene sus ventajas e inconvenientes. El sistema nervioso es más rápido que el hormonal, pero también exige que sea más complejo y, por lo tanto, requiere mayor espacio. Más que hablar de estos dos sistemas por separado, a la hora de hablar de los insectos y (de otros animales) seguramente sería más correcto decir que los mecanismos de regulación del comportamiento de estos invertebrados no son duales, sino que se dan gradualmente y solo es el ser humano que los ha dividido en estas dos categorías para poder estudiarlos con más sencillez.
En este sentido, existe un concepto de principios del siglo XX llamado neurosecreción que viene a decir que las neuronas también pueden producir hormonas. Las neurohormonas son producidas por las células neurosecretoras en todo el sistema nervioso central del animal (el cerebro forma parte del sistema nervioso central). Los productos de la neurosecreción no se limitan a las hormonas, también neurotransmisores, neuromodulares, reguladores de la secreción hormonal… Esta sustancias controlan los procesos fisiológicos y bioquímicos, como la metamorfosis de los insectos.
Los insectos responden a los estímulos adecuados
En el medio ambiente hay una gran variedad de estímulos, que provienen de fuentes muy variadas, como de otros animales, del suelo, del aire… y solo una pequeña fracción de ellos son relevantes desde el punto de vista biológico. Es decir, los insectos, como otros animales, ignoran todos aquellos estímulos del medio que no son relevantes y solo responden a un determinado tipo de estímulos. Los estímulos por los que los insectos responden son aquellos que son necesarios para su supervivencia y reproducción.
Por poner un ejemplo, en la naturaleza hay una gran variedad de estímulos olorosos, procedentes de las plantas, pero los receptores olfativos de las orugas responden de forma diferente, aunque estos insectos reciben información de forma simultanea de todos sus quimioreceptores, pero se produce una discriminación por cada estímulo en función de si es relevante o irrelevante para la supervivencia del propio insecto.
* Ver más sobre: Inteligencia de los insectos / Curiosidades sobre los animales
Más información sobre los animales invertebrados.
22 abril, 2019
