Vacunación en gatos

Cuándo se vacuna a un gato

¿Qué debemos saber primero sobre las vacunas para gatos?

Hoy en día, gracias a la existencia de las vacunas, millones de gatos en todo el mundo disfrutan de una protección casi completa contra enfermedades debilitantes o letales. En las pasadas dos décadas, algunos científicos han desarrollado vacunas para inmunizar gatos bebés y adultos contra enfermedades letales tales como la panleucopenia, la rinotraqueitis o el virus de la leucemia felina.

El calendario de vacunación del gato no es muy diferente al del perro.

Lo primero que debemos saber es que, antes de comenzar el ciclo de vacunación de nuestro gato, primero deberá adquirir la independencia materna. Por ello, no podremos vacunarlo antes del destete (entre las 8 y las 14 primeras semanas de vida). Ello se debe a que la leche materna, además de contener anticuerpos que tienen una gran función defensiva para el animal, reducen la eficiencia de las vacunas, incluso pudiendo desactivarlas completamente.

¿Qué debemos hacer para vacunar a nuestro gato?

Lo que primero que deberemos hacer es desparasitar nuestra mascota al poco tiempo de nacer, concretamente 40 días después. Para ello, tendremos que acudir al especialista para proceder a la desparasitación, que consiste en la administración de una pastilla o de una pasta especial para eliminarle a nuestra mascota los parásitos internos, algo que resulta muy importante para la vacunación.

Antes de proceder con la vacunación del animal, es muy importante desparasitarlo, ya que la presencia de parásitos internos podría alterar la eficacia de la vacuna.

Cuando nuestra mascota tenga nueve semanas de vida y deje de tomar la leche materna, se le debe dar una vacuna denominada trivalente felina que protegerá a nuestro animal contra la panleucopenia, la rínotraqueitis y el calcivirus felino.

15 días después, se le inyectará la vacuna contra la leucemia felina.

Pasado un mes exacto deberemos ir de nuevo a nuestro veterinario para revacunar a nuestro gato de las dos vacunas nombradas anteriormente.

Cuando nuestro gato tenga 1 año de vida, se le debe reforzar la trivalente y, si es el caso, la leucemia felina y la rabia.

Se recomienda administrar la vacuna contra la rabia entre los 4 y 6 meses de vida, con refuerzos cada 1 a 3 años dependiendo de la vacuna utilizada.

Aproximadamente cada 3 años, se le deben reforzar las vacunas recibidas.

¿Qué más debemos saber sobre la vacunación de un gato?

Las vacunas son un sistema preventivo y deben administrarse antes que el gato esté enfermo.

Depende de dónde proceda el gato y de cómo sea el estado de su salud, es posible que el veterinario le deba realizar pruebas como el test de inmunodeficiencia felina y el de la leucemia felina, para descartar estas enfermedades graves.

El tratamiento no se completa únicamente con la primera inmunización de nuestra mascota. Tendremos que desparasitarlo cada tres meses, además de la vacunación una vez al año durante toda la vida del animal.

Es importante que seamos conscientes de la importancia de cumplir muy bien las fechas señaladas para las vacunas, ya que de lo contrario se tendría que volver al proceso inicial.

Existen otras vacunas que se pusieron recientemente de moda, como la vacuna contra la PIF (peritonitis infecciosa felina) que no siempre son recomendables de administrar. Esta vacuna no siempre protege de la enfermedad y, en cambio, puede causarle una infección en algunas ocasiones.

En algunas comunidades autónomas españolas, la vacuna contra la rabia es obligatoria no sólo para los perros, también para los gatos.

La práctica de la vacunación cada 3 años en gatos se está extendiendo en Estados Unidos y otros países, mientras que en España todavía hay una fuerte tendencia a revacunarlos anualmente. Varios estudios hechos recientemente demuestran que en la mayoría de los casos el efecto de la vacuna administrada a los gatos dura unos 3 años. Si nuestro gato va a vivir siempre dentro de casa porque es un gato casero no se recomiendan revacunaciones anuales, pero si va a vivir afuera, porque lo tenemos en semilibertad corre más peligro de contagio y debe reforzarse con más frecuencia.

Todavía no hay vacuna para el síndrome de inmunodeficiencia felina o sida de los gatos.

Más información sobre el gato.

Editorial
Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

17 noviembre, 2022

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