Cómo se protegen los insectos palo de sus enemigos

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¿Cómo evitan los enemigos los insectos palo?

Los fásmidos o insectos palo cuentan con una serie de mecanismos de defensa para evitar a los enemigos, que pueden ser muy variados, como pájaros, arañas, lagartos, ratones y otros pequeños mamíferos o pueden ser atacados por insectos himenópteros parásitos.

Mimetismo: El aspecto físico del fásmido imita en forma y coloración a la vegetación del medio ambiente. Los fásmidos parecen hojas o ramitas secas para pasar desapercibidos a los ojos de los depredadores. La coloración de los insectos palo varía según la temperatura, la luz del ambiente o el grado de humedad. Los insectos palo no son muy veloces en la fuga, por lo que tienen que confiar en su camuflaje.
Movimientos especiales: Los fásmidos pueden moverse como si fuesen hojas ondeadas por el viento, lo que les proporciona un mayor mimetismo.
Comportamientos de amenaza: Los fásmidos pueden arquear el abdomen y emitir unos silbidos apretando las alas para espantar al depredador. Algunos fásmidos incluso pueden morder. El insecto palo de nombre científico Extatosoma tiaratum, cuando se ve acosado, dobla el abdomen, imitando perfectamente a un escorpión en estado de amenaza.

Los insectos palo son los maestros del camuflaje.

Espinas: Los insectos palo tienen una piel muy gruesa y su cuerpo está cubierta por espinas. Las espinas les dan a los fásmidos protección, pues les hace volverse muy miméticos y son usadas como arma defensiva. Si no sujetamos al insecto palo con cuidado, podemos hacernos daño con sus espinas.
Tanatosis: Cuando son molestados, los fásmidos fingen estar muertos, quedándose totalmente inmóviles con las patas extendidas, con ello consiguen que el depredador no se los coma, creyéndose que están muertos. En cautividad, los insectos palo también manifiestan este comportamiento, lanzándose al vacío en ocasiones.
Expulsión de un liquido maloliente irritante: Algunos insectos palo expulsan un liquido maloliente e irritante contra el depredador. Anisomorpha sp. es capaz de emitir esta sustancia a una considerable distancia gracias a sus dos glándulas torácicas. Para el hombre, este liquido sólo es dañino si entra en contacto con los ojos. Por ello, deberemos lavarnos bien las manos después de manipular a uno de estos insectos.
Autoamputación: Los fásmidos se pueden desprender de la pata por la que son capturados por un depredador. Estos insectos son capaces de regenerar la pata que han perdido.
Golpeo con las patas posteriores: Algunos insectos palo pueden dar golpes con sus patas posteriores cubiertas de espinas.

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