La piel de los anfibios

Sapo corredor
Foto de sapo corredor. Observen la piel desnuda y llena de glándulas de este sapo

Los anfibios no tienen pelo en la piel como los mamíferos, ni plumas como las aves, ni escamas como los reptiles, ni tampoco escamas como los peces ya que tienen la piel totalmente desnuda.

La piel de los anfibios puede ser muy lisa, como la de algunas ranas, como por ejemplo la piel de la ranita de San Antonio o la de la ranita Litoria caerulea o tan verrugosa como la del sapo común o la del sapo marino, por ejemplo.

El grosor de la piel no es el mismo entre los distintos anfibios. Los sapos y las ranas acuáticas son los anfibios con un espesor relativamente grande. En cambio, las ranas arborícolas tienen una piel más fina como la ranita meridional. No obstante, la piel de los anfibios comparada con la de los animales terrestres es mucho más fina porque estos animales necesitan respirar a través de la piel.

Estructura de la piel de los anfibios

Piel de sapo común
Foto de piel de sapo común. Los anfibios tienen en la piel una gran cantidad de glándulas cutáneas que la mantienen siempre húmeda y, en el caso concreto de los sapos y algunas ranas, también está provista su piel de glándulas venenosas que le dan un aspecto tosco o incluso un poco desagradable.

Muchos anfibios en su piel tienen las glándulas venenosas, siendo muy importantes las glándulas parótidas de los sapos y salamandras. Los sapos y algunas ranas tienen la piel protegida por glándulas venenosas. El veneno de los sapos y salamandras actúa de protección contra los animales depredadores pero también como defensa contra las enfermedades causadas por hongos y bacterias (tiene propiedades fungicidas y antibacterianas).

Las glándulas mucosas de la piel de los anfibios, que secretan mucus, la mantienen húmeda para permitir la respiración cutánea. De ahí que los anfibios necesiten que su piel se mantenga siempre húmeda.

Funciones de la piel de los anfibios

La piel de los anfibios actúa como protección contra la evaporación y permite la absorción de agua. Además, es el órgano respiratorio de los anfibios y está recubierta en muchos casos de veneno.

* Más información sobre: Funciones de la piel de los anfibios / ¿Por qué los anfibios tienen la piel siempre húmeda?

La respiración de los anfibios y la piel

Los anfibios disponen de respiración cutánea para permitirles respirar cuando están dentro del agua, ya que estos animales están muy relacionados con el agua. Utilizan el agua para reproducirse, como protección contra los depredadores y en la hibernación. Es decir, los anfibios realizan las puestas en el agua, se zambullen en el agua al menor signo de peligro e hibernan en el fondo de los estanques u otros puntos de agua.

En la respiración cutánea de los anfibios, el oxígeno pasa a través de la piel gracias al agua contenida en ella. Más concretamente, el agua sirve para hacer el intercambio de gases entre el animal y el exterior.

En los anfibios, la piel es el principal órgano respiratorio como órgano que cubre una gran superficie. De forma general, a los anfibios, la respiración cutánea les permite cubrir la mitad de sus demandas de oxígeno.

Cuando los anfibios están a baja temperatura, respiran principalmente a través de la piel, por lo que pueden hibernan en el fondo de los lagos sin tener que subir a la superficie a tomar aire.

Ciertas salamandras no poseen pulmones y dependen de la respiración cutánea, como las del género Bolitoglossa. En las ranas Centrolenidae, la respiración a través de la piel también es muy importante.

* Ver más sobre: La piel de los reptilesLa piel de la cebra

Más información sobre los anfibios.

Editorial
Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

25 agosto, 2024

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