Partes del huevo

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1 Constituyentes del huevo y qué funciones tiene cada parte

Constituyentes del huevo y qué funciones tiene cada parte

¿Qué es el huevo y qué propiedades tiene?

El huevo es un alimento de origen animal muy nutritivo, que se consume en la alimentación desde tiempos inmemoriales. Cuando hablamos de huevos nos referimos a los que proceden de las gallinas, ya que son los más comúnmente consumidos.

Partes del huevo

¿Cuántas partes tiene un huevo?

La partes principales de un huevo son:

La cáscara (3) o envoltorio exterior, que es la encargada de proteger el contenido del interior.
La yema (1) que se encuentra en el interior del huevo, generalmente en forma de bolita y es la que proporciona nutrientes al pollo. Se encuentra rodeada por la membrana vitelina (7). en la parte superior se encuentra el blastodisco (6) formado por varias capas de células. El él se produce el desarrollo de las células embrionarias al fecundarse el huevo.
La clara que, en forma líquida se encuentra entre la cáscara y la yema. Esta última es rica en agua y proteínas. Esta rodeada externamente por la membrana interna (8)

Otras partes del huevo

Existen otras partes del huevo menos conocidas, que también ayudan a su protección, como son:

La cámara de aire (4): la encontramos entre la cáscara y la clara y la podemos apreciar si llevamos a ebullición un huevo y posteriormente procedemos a retirarle la cáscara. Este huevo, ahora en estado duro, siempre tiene en mayor o menor medida un “espacio vacío” que evita que la clara cocida sea totalmente ovalada. Éste espacio, es la cámara de aire y su tamaño variará en función de la frescura del huevo, siendo mayor cuando menos fresco sea el huevo.
Las enzimas: las encontramos en el interior de la clara junto con las proteínas.
Las chalazas (5) (son dos filamentos parecidos a unos cordones de color blanquinoso y grosor relativamente fino, que sujetan la yema en el centro del huevo para evitar posibles daños por golpes.

¿Es bueno o recomendable quitarle la yema?

Durante mucho tiempo se ha recomendado erróneamente quitar la yema del huevo, porque supuestamente ésta, al ser rica en colesterol, era perjudicial. Actualmente sabemos que es mejor no hacerlo y consumir el huevo entero, porque al retirar la yema se disminuye valor nutricional de este alimento. Por ejemplo, aunque la mayoría de proteínas del huevo se encuentran en la clara, la yema de huevo contiene un 40% de las proteínas totales del huevo, por lo que quitarla supone una disminución del valor proteico de este alimento. Además en la yema se encuentran gran cantidad de nutrientes, como ácidos grasos esenciales, colina, vitamina E, hierro,etc.