Toxicidad del haba
Las habas o habichuelas (Vicia faba L.) son legumbres comestibles que se consumen en la alimentación desde hace milenios. Las semillas de haba no son tóxicas cuando se preparan y de consumen adecuadamente:
Habas en su vaina. Dibujo: ©Dibujosparapintar.com |
¿Qué componentes tóxicos tienen las habas?
Como muchas legumbres, las habas tienen unos componentes conocidos como antinutrientes, que inhiben o impiden la asimilación de nutrientes, es decir, disminuyen la digestibilidad de las proteínas y carbohidratos que contienen las habas y disminuyen la absorción de minerales (sustancias como saponinas, inhibidor de proteasas, inhibidor de amilasa, fitatos, etc).
¿Qué problemas puede acarrear comer habas?
Sin embargo, los antinutrientes de las habas no son tóxicos en las dosis alimentarias que se consumen, aunque reducen el valor nutritivo del alimento, impidiendo la digestión de proteínas y carbohidratos, y pudiendo provocar flatulencia, gases, dolor de estómago, diarrea, etc.
Los antinutrientes se eliminan a través del remojo y la cocción de las habas. Una cocción incompleta puede producir síntomas intestinales leves.
Si las habas producen molestias intestinales, se recomienda dejar de comerlas y consultar con un médico para descartar el fabismo.
*Más información: Antinutrientes de las legumbres
Las habas pueden ser tóxicas
Fabismo, la enfermedad por intolerancia a las habas
Las personas con fabismo pueden tener ataques si consumen leche de vacas alimentadas a base de habas. |
Las habas pueden ser muy tóxicas para algunas personas que presentan una enfermedad llamada fabismo. Consiste en una intolerancia alimentaria a las habas producida por una alteración genética. Por falta de una enzima, no se pueden descomponer determinados compuestos de las habas, que resultan tóxicos y producen la rotura de las células de la sangre.
La enzima glucosa-6-fosfatodeshidrogenasa (G6PD) es la encargada de descomponer ciertos tóxicos que se encuentran en las habas (sobre todo en las habas tiernas), las aminas tóxicas vicina y convicina, que en el intestino se degradan en divicina e isouramil.
Estas sustancias, al no metabolizarse, son tóxicas y producen una rotura de los glóbulos rojos de la sangre (anemia hemolítica).
Las personas con fabismo pueden experimentar síntomas parecidos a una alergia tras las 48 horas posteriores a la ingesta de este alimento, o por exposición al polen de la planta (entonces los síntomas suelen aparecer a las 8 horas).
El fabismo produce alteraciones neurológicas, vértigos, mareos, dolor de cabeza, dolor abdominal, fiebre, y puede producir complicaciones como esplenomegalia y hepatomegalia (aumento del tamaño del bazo e hígado respectivamente), aumento de la bilis en la sangre (hiperbilirrubinemia), crisis hemolítica, ictericia, etc.
¿Qué variedades de haba pueden producir fabismo?
Las variedades Vicia faba var. equina y var. angustifolia son las más ricas en estas aminas tóxicas y las responsables normalmente de los síntomas más graves, pero son las que suelen utilizarse para la alimentación animal, no la humana. Las personas con fabismo pueden tener ataques si consumen leche de vacas alimentadas a base de habas.
*Más información: Fabismo
Precauciones de las habas para niños y bebés
Las habas no son adecuadas para los bebés porque pueden producir alergia. Siguiendo la tabla de introducción de los alimentos, los niños no deben comer legumbres hasta los 13 meses para prevenir alergias. Se recomienda un remojo y cocción muy largos. Se debe atender a las reacciones del cuerpo por si padecer fabismo (se padece por herencia genética, pero la enfermedad no necesariamente se manifiesta en los padres).
Para niños pueden ser un alimento muy flatulento y se recomienda introducirlo en cantidades muy pequeñas, mezclado con patatas, zanahorias o arroz. Además, para prevenir atragantamientos, se recomienda triturar las habas dentro del puré o aplastarlas.
Contraindicaciones de las habas
Las habas son una legumbre muy sabrosa y nutritiva pero no son adecuadas en determinadas situaciones.
Más información sobre las contraindicaciones de las habas.
29 agosto, 2024