Contenidos
- 1 ¿Cómo es el proceso de digestión de los alimentos?
- 1.1 ¿Qué es el proceso digestivo?
- 1.2 La digestión empieza en el cerebro: fase cefálica
- 1.3 ¿Cómo se absorben los alimentos?
- 1.4 ¿Dónde se transforman los alimentos en nutrientes?
- 1.5 Digestión en la boca
- 1.6 Composición de la saliva
- 1.7 ¿Cómo van los alimentos de la boca al estómago?
- 1.8 Digestión en el estómago
- 1.9 Paso del estómago a los intestinos: el quimo
- 1.10 Digestión en los intestinos:
- 1.11 Funciones digestivas del intestino delgado
- 1.12 ¿Cómo avanza el quimo del estómago al ano?
¿Cómo es el proceso de digestión de los alimentos?
¿Qué es el proceso digestivo?
La digestión de los alimentos es un proceso mecánico y químico que se produce en el organismo para poder descomponer y absorber los nutrientes que nos aportan los alimentos.
Intervienen procesos mecánicos como la masticación, y componentes químicos como las hormonas del apetito o las enzimas de los jugos digestivos.
¡La digestión empieza en el cerebro!
La digestión empieza en el cerebro: fase cefálica
La digestión empieza en el cerebro, en lo que se conoce científicamente como fase cefálica de la digestión. En esta primera etapa digestiva, el cerebro percibe que se va a comer, ya sea porque sabemos que es la hora de comer, porque el olor se filtra desde la cocina al comedor, porque sabemos que al llegar a casa la comida estará en la mesa, etc.
En cualquier caso, cuando el cerebro sabe que se va a comer empieza a producir toda una serie de sustancias químicas, hormonas, que irán directas a avisar al sistema digestivo. Los órganos digestivos responden a estas señales moviéndose y empezando a producir secreciones. ¿A quién no le ha pasado salivar mucho ante una comida muy apetitosa?
La fase cefálica es muy importante porque empieza a preparar los órganos digestivos. Esto a su vez, genera la sensación de apetito. En español existe una expresión muy descriptiva de esta fase: «hacerse la boca agua«, referente a la salivación excesiva que se produce ante un plato delicioso. Por ejemplo, «se me hace la boca agua con este olor a pastel recién horneado».
En remedios naturales, se utilizan especias y hierbas aromáticas para ensalzar el sabor de los platos y que éstos sean más sabrosos, lo que consigue aumentar estas señales químicas cerebrales y aumentar el apetito.
¿Cómo se absorben los alimentos?
Los alimentos sólo se pueden asimilar una vez han sido disgregados y transformados en nutrientes. Por este motivo, durante el proceso digestivo, los alimentos sufren una transformación y se descomponen en moléculas más pequeñas que sí pueden ser absorbidas, llamadas nutrientes.
¿Dónde se transforman los alimentos en nutrientes?
A lo largo de todo el tracto digestivo, principalmente boca, estómago e intestino delgado, la presencia de enzimas rompen los componentes de los alimentos dando como resultado los siguientes nutrientes principales:
- Hidratos de carbono en disacáridos y glúcidos.
- Proteínas se descomponen en aminoácidos.
- Grasas en ácidos grasos de cadena corta y media.
- Fibra es el único componente de los vegetales que el cuerpo humano no puede descomponer. Su función en el organismo es limpiar el intestino y alimentar la flora intestinal.
Digestión en la boca
Aparato digestivo
- Los dientes rompen los alimentos en partículas más pequeñas para que la superficie de contacto entre el alimento y los jugos digestivos sea mayor. Masticar bien los alimentos previene las digestiones pesadas ya que facilita la función de los demás órganos digestivos.
- La lengua ayuda a pasar los alimentos por las piezas dentales y a ensalivar los alimentos. No debemos olvidar que en la lengua se encuentran las papilas gustativas, capaces de hacer que el proceso de comer sea agradable y placentero.
- La saliva contiene enzimas digestivas, es decir, sustancias capaces de digerir algunos alimentos.
Composición de la saliva
La saliva es el primer fluido digestivo del organismo. Contiene diversos componentes encargados de disgregar los alimentos, llamados enzimas.
La más importante es la enzima amilasa salival (también llamada sacarasa). La amilasa se encarga de descomponer los hidratos de carbono complejos en glúcidos o moléculas más pequeñas como la glucosa. Por ejemplo, si masticamos durante mucho rato un trozo de pan, podremos comprobar que cada vez es más dulce debido a la digestión realizada por la saliva, que descompone los hidratos de carbono complejos del pan en moléculas de azúcar.
Además, la saliva también contiene otros enzimas, como la lipasa lingual o lipasa salival (encargada de predigerir las grasas), maltasa y beta-glucoronidasa (para digerir el almidón), etc.
¿Cómo van los alimentos de la boca al estómago?
Los alimentos viajan al estómago a través un tubo largo, llamado esófago.
En la boca del estómago se encuentra una válvula que regula la entrada de los alimentos al estómago, llamada cardias. A su vez, esta válvula evita que los alimentos pasen del estómago al esófago otra vez.
Las personas a quienes esta válvula no les funciona bien pueden presentar problemas como ardor en el pecho o hernia de hiato. (Una de las recomendaciones para estas personas será no acostarse después de comer).
Digestión en el estómago
En el estómago se realizan las siguientes funciones digestivas:
La higiene bucal después de comer evitará la aparición de caries y problemas dentales.
- En el estómago se digieren las proteínas de los alimentos, que se descomponen en aminoácidos.
- El estómago produce secreciones digestivas, conocidas como jugos gástricos. Éstos contienen ácido clorhídrico, para descomponer los alimentos, y enzimas como la proteasa. La proteasa es la enzima que descompone las proteínas en aminoácidos.
- Cuanta más proteína hay en el estómago, más secreciones ácidas se secretan. Por este motivo, las personas con acidez gástrica deben evitar comer cantidades exageradas de proteínas, como sería por ejemplo una barbacoa o un bistec grande de carne, leche, queso, huevos, etc.
- Los alimentos pueden permanecer horas en el estómago. No masticar, comer demasiada carne o comer alimentos muy ricos en grasas provoca que los alimentos necesiten estar más tiempo en el estómago. Durante ese tiempo, mientras se produce la descomposición de la proteína, si se ha comido mucho y los demás alimentos están en el estómago, se produce una sensación de plenitud, pesadez y malestar.
Paso del estómago a los intestinos: el quimo
Los alimentos salen del estómago hacia el intestino completamente descompuestos por la acción de los jugos gástricos. Este bolo alimenticio se llama quimo.
La válvula que controla el paso de los alimentos del estómago al intestino delgado se llama píloro.
Digestión en los intestinos:
Los intestinos son órganos digestivos muy importantes ya que en éstos se se realiza la absorción de los nutrientes y de agua.
Los intestinos se distinguen en:
- Intestino delgado, que se divide en tres partes: duodeno (parte que conecta con el estómago y donde desembocan los conductos del hígado y páncreas), yeyuno e íleon (parte terminal que une con el intestino grueso).
- Intestino grueso, que se divide en tres partes: colon ascendente, transversal y descendiente.
Funciones digestivas del intestino delgado
El intestino delgado mide aproximadamente 6 metros de largo y 3 cm. de grosor. Esta longitud es necesaria para que los nutrientes puedan ser descompuestos y el cuerpo tenga tiempo suficiente para absorberlos.
¿Cómo avanza el quimo del estómago al ano?
El quimo avanza gracias a la motilidad, peristaltismo o movimiento de los intestinos, que a su vez también ayuda a disgregarlo, lo «aplasta» para romperlo en trocitos y que haya mayor superficie de contacto con los jugos digestivos.
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31 enero, 2024