Contenidos
- 1 Beneficios de las algas
- 1.1 Las algas, un alimento tradicional para el futuro
- 1.2 Propiedades nutritivas de las algas
- 1.3 ¿Tienen muchas calorías?
- 1.4 Las algas son diuréticas y anti-celulíticas
- 1.5 Las algas son anti-celulíticas
- 1.6 Contenido en calcio de las algas
- 1.7 Las algas en dietas para adelgazar
- 1.8 Antioxidantes de las algas
- 1.9 Algas para enfermedades del corazón
- 1.10 Las algas depurar el organismo y evitar el estreñimiento
- 1.11 Algas contra el cáncer
- 1.12 Las algas son buenas para el cabello, uñas, huesos y dientes
- 1.13 Moderar las algas para evitar problemas de tiroides
- 1.14 Las algas como fuente de yodo para quienes comen poco pescado
- 1.15 Mito: Las algas y la vitamina B12
- 1.16 Algas en dietética naturista y oriental
Beneficios de las algas
Las algas, un alimento tradicional para el futuro
El consumo de algas se produce de forma tradicional desde hace siglos en muchas poblaciones costeras. Su consumo era poco conocido hasta que en los últimos años se han resurgido como un alimento de moda.
Alga wakame de venta en un mercado europeo, en Viena
Lo cierto es que las algas son plantas realmente muy concentradas en nutrientes y de cultivo sostenible. En definitiva, las algas son un alimento prometedor en la alimentación del futuro.
Cada vez son más las universidades que reconocen el valor nutritivo de las algas comestibles, y no existe ningún organismo que las contraindique.
Las algas son excepcionales verduras del mar, alimentos que pueden enriquecer y equilibrar la dieta, además de ampliar nuestra variedad de vegetales, a menudo procedentes de tierras sobreexplotadas o de extensos y anti-ecológicos monocultivos.
En definitiva, las algas son otro saludable alimento que nos ofrece la naturaleza, y que yace escondido bajo el misterioso océano.
Propiedades nutritivas de las algas
Foto de alga cochayuyo seca
Las algas son alimentos vegetales ricos en fibras (principalmente fibra soluble), vitaminas y sobre todo, muchos minerales alcalinos, como un elevado aporte de potasio, calcio y magnesio. En las dosis que se consumen, no contienen prácticamente grasas ni proteínas, aunque aportan ciertas cantidades de estos nutrientes, entre las que se encuentran ácido linolénico y linoleico (omega 3 y 6) y ciertos aminoácidos esenciales.
Por lo que más destacan estas verduras marinas es por su contenido en fibras, que aportan mucha saciedad y propiedades en la alimentación. La fibra también es capaz de capturar ácidos estomacales y reducir la acidez de estómago, recomendable en caso de gastritis y úlcera.
Además en el intestino estimulan el tránsito y previenen el estreñimiento. Las algas también presentan un tipo de fibra muy interesante que sirve como sustrato para la microbiota o flora intestinal y ayudan a la proliferación de bacterias fermentativas buenas en el colon.
¿Tienen muchas calorías?
Igual que las verduras, las algas no aportan prácticamente calorías. Por lo tanto son un alimento muy nutritivo para equilibrar dietas saludables y dietas para adelgazar.
Lámina resumen con algunas de las propiedades nutricionales de las algas, las «verduras del mar».
Las algas son diuréticas y anti-celulíticas
Las algas contienen muchísimo potasio, siendo las verduras más ricas en este mineral. El potasio es necesario para mantener el equilibrio de líquidos en el organismo y para ayudar a eliminar la sal. Por lo tanto, cuando no se consumen saladas, son alimentos muy diuréticos y muy recomendables en dietas para el corazón.
Además se ha observado que una dieta rica en potasio reduce la formación de piedras en los riñones y ayuda a evitar la osteoporosis.
Cuando se consumen secas, aunque tengan sabor un poco salado, siguen siendo diuréticas, porque las algas son más ricas en potasio que en sodio, por lo que se mantienen sus propiedades diuréticas a pesar del sabor a mar.
Las algas son anti-celulíticas
Debido a su alta concentración de minerales, vitaminas y proteínas, además todas las algas pueden ayudar a reducir la celulitis y evitar retenciones de líquidos. De hecho, las algas son un ingrediente habitual en las famosas cremas cosméticas para reducir el volumen abdominal.
Hasta las cremas anticelulíticas más famosas incorporan algas en su composición. Por su contenido en minerales, drenan la retención de líquidos
Si a nivel tópico tienen efectos anti-celulíticos, ¿por qué no comerlas para prevenir u obtener los mismos efectos o incluso más eficaces? No debemos olvidar que las algas son muy ricas en yodo, por lo que estimulan la tiroides y ayudar a acelerar el metabolismo y quemar grasas.
*Véase: Dieta para eliminar líquidos y celulitis
Contenido en calcio de las algas
Todas las algas son muy ricas en calcio, tienen un contenido superior al de los lácteos.
Por ejemplo, 100 ml de leche contienen 120mg de calcio, mientras que la misma cantidad de alga wakame contiene 1.300mg de calcio. Es decir, en 20 gramos de alga seca se aporta tanto calcio como un vaso de leche. Además de mucho calcio, las algas también aportan magnesio, potasio y oligoelementos necesarios para la remineralización del organismo.
Su valor nutricional las hace muy adecuadas en la menopausia, en personas con problemas de huesos, y en general, como aporte de calcio en dietas vegetarianas y veganas.
También se pueden beneficiar de su contenido en potasio y calcio los atletas y deportistas, a quienes les ayudará a mineralizar el organismo después del desgaste y las pérdidas producidas por el ejercicio y por el sudor.
Sin embargo, se debe considerar que la cantidad de alga recomendada para el consumo es poca, por lo que se debe completar el aporte de calcio a través de otros alimentos ricos en este mineral. *Véase: Dieta rica en calcio
Las algas en dietas para adelgazar
Las algas son un alimento muy adecuado para introducir en dietas de adelgazamiento:
Sopa de algas. Una forma de consumir algas es cocerlas y triturarlas dentro de una crema de verduras. No se recomienda comer más de 1 ración al día de algas, especialmente en casos de problemas de tiroides.
- Tienen un alto contenido en fibra, que aporta saciedad y sensación de plenitud, regula el tránsito intestinal, y favorece la eliminación de grasa.
- El consumo regular de fibra soluble (como la que aportan las algas, tipo alginatos o carragenatos) consigue reducir el colesterol.
- Son una fuente importante de yodo, mineral constituyente de las hormonas del metabolismo (hormonas tiroideas), muy importante para el buen funcionamiento de todo el cuerpo.
- Son verduras del mar, sin calorías. Igual que las verduras terrestres, las algas no contienen apenas calorías, siendo un alimento nutritivo perfecto para equilibrar nuestra dieta y nutrirnos bien, sin influir en el balance calórico de la dieta.
Antioxidantes de las algas
Las algas son verduras con gran cantidad de antioxidantes, por su gran contenido en pigmentos fotosintéticos como la clorofila y xantofilas, vitamina E, vitamina C, polifenoles (florotaninos, fucol y catequinas), fosfolípidos, alginatos y fucanos. Estas sustancias son capaces de neutralizar los radicales libres que se forman en el organismo, sustancias nocivas que aceleran el daño de las células y el envejecimiento prematuro.
Algas para enfermedades del corazón
Por su alto contenido en potasio, alginatos y fucanos, las algas son muy recomendables en dietas para enfermedades del corazón, como hipertensión, taquicardia, arritmia,… El potasio es un mineral indispensable para la contracción de los músculos, y entre ellos, el correcto funcionamiento del músculo del corazón. La cantidad de potasio que aportan las algas es muy superior al que pueden aportar la mayoría de vegetales y frutas.
Los medicamentos diuréticos que a veces se utilizan para tratar la hipertensión pueden producir una eliminación excesiva de potasio, por lo que consumir algas también ayudará a estas personas a compensar las pérdidas de este mineral. Debido a que estas algas son un alimento muy concentrado en minerales, es suficiente con 1 ración al día.
La ingesta habitual de alginatos y fucanos (polisacáridos presentes en las algas) puede contribuir a la prevención de enfermedades cardiovasculares debido a contribuye a la eliminación de trombos.
Las algas depurar el organismo y evitar el estreñimiento
Por su alto contenido en nutrientes, las algas son muy adecuadas en dietas para depurar el hígado (acompañar de extracto de plantas para el hígado). Una de las más aconsejables en estos casos es el alga cochayuyo, por su contenido en N-acetil-cisteína, que ayuda al hígado en sus funciones de desintoxicación.
Por otra parte, las algas también tienen una gran capacidad de eliminación a nivel intestinal debido a su elevado contenido en fibras. Algunos tipos de algas son muy adecuados para ayudar a combatir el estreñimiento. Entre ellas se encuentran el alga musgo de Irlanda (o “Carragheen”), por su contenido en carragenatos, y el alga agar-agar. Por ejemplo, podemos ingerirlos cómodamente en forma de gelatina.
La fibra de las algas ayuda a aumentar el volumen de las heces, facilita el tránsito y favorece la evacuación, lo que también es importante en casos de hemorroides.
Algas contra el cáncer
Las algas son ricas en fucoidán, un componente que ayuda a luchar contra el cáncer. Después de Hiroshima, estos vegetales se utilizaron como remedio contra el cáncer de tiroides debido a que su elevado contenido en yodo desplazaba los metales radioactivos.
*Más información: Algas quelantes contra el cáncer
Las algas son buenas para el cabello, uñas, huesos y dientes
Por su concentración en muchos nutrientes, las algas constituyen un suplemento dietético adecuado para prevenir la caída de cabello y fortalecer el pelo y uñas. Las algas contienen flúor, que protege los dientes.
Además contienen otros oligoelementos que pueden ayudar a mejorar la salud ósea, junto con una dieta equilibrada.
Moderar las algas para evitar problemas de tiroides
Las algas son un alimento muy rico en yodo. No se recomienda consumir muchas algas debido a su riqueza en este mineral. Una ración es aproximadamente de 20-30 gramos de alga al día, y no es necesario que se consuman todos los días.
Aunque habitualmente no es importante la presencia de estos alimentos en la dieta, sí que resulta significativo en dietas como la Macrobiótica, donde se puede consumir fácilmente un exceso de yodo por la presencia de muchas algas en la dieta.
Las personas con hipotiroidismo pueden tomar algas, en las raciones recomendables y evitando combinarlas con alimentos muy ricos en yodo (sal yodada y pescado principalmente).
En caso de hipertiroidismo no se deben comer algas ni sal yodada, porque son alimentos demasiado ricos en yodo. En la dieta para el hipertiroidismo puede ser adecuado el consumo de crucíferas como la col o el brócoli por sus componentes bociogénicos que impiden la fijación del yodo en el tiroides.
*Más información: Algas para hipotiroidismo e hipertiroidismo
Las algas como fuente de yodo para quienes comen poco pescado
El yodo es un mineral fundamental para el desarrollo del organismo y para el metabolismo, que solamente está presente en alimentos marinos, y en menor cantidad, en algunas verduras (dependiendo de la calidad del terreno donde se ha cultivado).
Las fuentes alimentarias naturales de yodo son los alimentos marinos: pescado, marisco, algas y sal marina.
Debido al escaso consumo de la población de estos alimentos, se enriquece la sal de mesa con yodo (“yodada”), con el fin de cubrir las necesidades de este nutriente en la población y evitar enfermedades producidas por su carencia como el raquitismo. Otra opción mejor sería aportar yodo a través de alimentos naturales como las algas, el pescado o el marisco.
Las algas son una fuente de yodo muy adecuada para personas que no tomas suficiente: cuando no se come suficiente pescado, cuando una persona es alérgica al pescado, etc.
Mito: Las algas y la vitamina B12
Es cierto que las algas contienen ciertas cantidades de vitamina B12. Popularmente se sabe que esta vitamina se encuentra sólo en los productos de origen animal, cuyo déficit puede verse en vegetarianos y producir anemia megaloblástica.
Pero aunque las algas pueden contener ciertas cantidades de vitamina B12, ésta no es funcional (es un análogo), es decir, se parece a la vitamina B12 que nuestro cuerpo utiliza, pero es inútil.
Sin embargo, las algas son igualmente recomendables para la anemia porque son alimentos muy ricos en hierro. Igualmente, en la dieta para la anemia se debe tener en cuenta que el hierro de origen vegetal se asimila peor que el hierro que proviene de los alimentos animales.
*Más información: Vitamina B12 de las algas
Algas en dietética naturista y oriental
Según la Medicina Tradicional China (MTC), se considera que las algas son un alimento de naturaleza térmica enfriadora, que se recomiendan en toda dieta saludable, pero especialmente para personas con debilidad de los riñones y síntomas de calor: sofocos, transpiración excesiva, poca orina, hipertensión, ardor de estómago, estreñimiento seco, etc.
En ese sentido, las algas se aconsejan mucho en la menopausia, cuando la MTC considera que disminuye la energía de los riñones (elemento agua), y el déficit de agua aviva el fuego interno, produciendo los síntomas típicos de la menopausia (sudores, calor, sequedad,etc.).
Las algas nutren el elemento agua, lo que las hace adecuadas para problemas de los riñones y la vejiga (infecciones urinarias, cistitis,…). En general, todas las algas tienen estas aplicaciones.
Más información sobre las contraindicaciones de las algas.
Lista de algas comestibles | ||
Arame | Agar-agar | Cochayuyo |
Espagueti de mar | Espirulina | Dulse |
Fucus | Hiziki | Kombu |
Musgo de Irlanda | Nori | Wakame |
9 marzo, 2021