Contenidos
- 1 Leyes sobre los aditivos alimentarios
- 1.1 ¿Cómo se regula la seguridad de los aditivos alimentarios?
- 1.2 ¿Cómo informarse sobre los aditivos alimentarios?
- 1.3 ¿Qué son las listas positivas de aditivos?
- 1.4 Principios para autorizar un aditivo en las “Listas Positivas”
- 1.5 ¿Quién evalúa la seguridad de los aditivos alimentarios?
- 1.6 Justificación del uso de aditivos. ¿Cuándo está prohibido usar aditivos alimentarios?
- 1.7 Alimentos sin aditivos alimentarios. ¿Qué alimentos no tienen aditivos?
- 1.8 Repaso
Leyes sobre los aditivos alimentarios
¿Cómo se regula la seguridad de los aditivos alimentarios?
El término aditivos, referido esas sustancias que constan en la letra pequeña del envase de un producto alimentario, a menudo causa desconfianza y temor al consumidor respecto a su origen, naturaleza, y sobre todo, a sus efectos sobre la salud a corto y largo plazo.
Diariamente, millones de personas consumen productos con aditivos.
¿Cómo informarse sobre los aditivos alimentarios?
Cada vez son más los consumidores que, por falta de información inteligible, buscan respuesta a sus dudas acerca de estos “nuevos ingredientes”, y quieren saber si su autorización para su consumo es estricta o si por el contrario, está poco regulada.
En primer lugar, cabe desmentir que muchos de los aditivos que se utilizan actualmente no son sustancias artificiales, sino que están presentes en la naturaleza. De la misma manera, no hay que rechazar sistemáticamente los avances científicos en la alimentación, pues en otros campos de la salud, los avances científicos han tenido gran éxito e importancia a lo largo de la historia.
Permitir el empleo de los aditivos en los productos alimentarios depende de rigurosas investigaciones y evaluaciones cuidadosas, estrictas regulaciones y continuos controles toxicológicos.
¿Qué son las listas positivas de aditivos?
La legislación que controla el uso de los Aditivos alimentarios ha elaborado unas “Listas Positivas”, en las que constan todos los aditivos permitidos.
Existen “Listas Positivas” para distintos sectores industriales, ya que no solamente los alimentos contienen sustancias añadidas con fines tecnológicos.
En el campo que nos ocupa, las Listas Positivas para los aditivos alimentarios son públicas, y pueden obtenerse de los organismos oficiales pertinentes, en este caso, del Codex Alimentarius.
Por tanto, para poder ser utilizados los aditivos alimentarios, éstos tienen que constar en las “Listas Positivas” del Códex alimentarius. En caso contrario, si no figuran en estas listas, no están permitidos.
Principios para autorizar un aditivo en las “Listas Positivas”
La autorización de uso de un aditivo está sujeta a tres condiciones:
- La sustancia debe ser inofensiva desde el punto de vista sanitario. Solo se autorizarán en las listas positivas aquellos aditivos que no representen ningún peligro para la salud del consumidor en las dosis propuestas, en la medida en que sea posible juzgar sobre los datos científicos de que se dispone
- La sustancia no debe inducir a error al consumidor. Un producto alimentario, por la adición de un colorante u otro tipo de aditivo, no puede dar a entender que contiene un ingrediente.
- Debe ser un aditivo técnicamente necesario. Debe existir una necesidad tecnológica suficiente, siempre y cuando el objetivo deseado no pueda alcanzarse por otros métodos económica y tecnológicamente utilizables. Por ejemplo, cuando la forma de preparación de una mayonesa no es posible sin un emulsionante, éste puede utilizarse. Sin embargo, ¿es necesario un aditivo gelificante para un yogur? La respuesta es no, y por ello existe una lista de alimentos garantizados sin aditivos aquí.
¿Quién evalúa la seguridad de los aditivos alimentarios?
Los organismos evaluadores de la seguridad de los Aditivos alimentarios son:
- Scientific Committee for Food (SCF). Encargado de la seguridad de los aditivos alimentarios en Europa.
- Joint Expert Committee on Food Additives (JECFA). Comité de expertos que trabaja para la seguridad de los aditivos alimentarios a nivel internacional bajo los auspicios de la FAO y la OMS.
Justificación del uso de aditivos. ¿Cuándo está prohibido usar aditivos alimentarios?
El uso de aditivos alimentarios está justificado únicamente si cumplen los requisitos descritos en los Principios para autorizar un aditivo en las “Listas Positivas”, y únicamente cuando no se puedan alcanzar los objetivos tecnológicos deseados por otros medios factibles económica y tecnológicamente.
Por tanto, y según se dictamina en la normativa de la Comisión del Códex Alimentarius de la FAO y OMS, los aditivos alimentarios únicamente pueden usarse cuando:
- Conserven la calidad nutritiva del alimento.
- Aporten constituyentes esenciales a los alimentos destinados a grupos de consumidores con necesidades dietéticas especiales.
- Refuercen la conservación o la estabilidad de un alimento; o mejoren sus propiedades organolépticas, sin llevar a engaño al consumidor.
- Sirvan de ayuda para la fabricación, elaboración, tratamiento, envasado, transporte o almacenamiento del alimento.
- Su uso no debe enmascarar el empleo de materias primas defectuosas o de prácticas y técnicas inconvenientes, incluida la falta de higiene.
Alimentos sin aditivos alimentarios. ¿Qué alimentos no tienen aditivos?
De acuerdo con el primer principio de la legislación de los aditivos alimentarios, éstos deben emplearse únicamente cuando sean tecnológicamente necesarios.
En otras palabras, no pueden añadirse aditivos a todos los alimentos, porque en determinados productos, pueden obtenerse las mismas propiedades u objetivos tecnológicos deseados mediante otras medidas técnica y económicamente factibles. Por ley, existe una lista de alimentos que no pueden llevar aditivos.
Repaso
Para que un aditivo pueda ser utilizado en un alimento concreto, éste debe estar incluido en las “Listas Positivas” del Códex Alimentarius.
Todos los aditivos deben ser sometidos evaluaciones constantes, con ensayos toxicológicos, en los que se tendrá en cuenta los efectos secundarios, la toxicidad y los efectos sobre la salud a corto y a largo plazo.
Deberán aprobarse solamente aquellos aditivos que hasta el momento pueda juzgarse, sobre la base de pruebas científicas disponibles, que no presentan ningún riesgo para la salud del consumidor en los niveles de uso propuestos.
Todos los aditivos deben ser sometidos a una observación continua y ser re-evaluados siempre que sea necesario, a la luz de los nuevos usos y de los datos científicos.
Más información sobre los aditivos alimentarios.
6 diciembre, 2021