Contenidos
- 1 Características, usos y cuidados de la planta
- 1.1 ¿Qué es la soja y para qué se utiliza?
- 1.2 Descripción de la planta de la soja
- 1.3 Origen de la soja
- 1.4 Variedades de soja
- 1.5 Consejos para el cultivo de soja
- 1.6 ¿Cómo cultivar soja en casa, en el jardín o terreno?
- 1.7 Tipo de suelo para el cultivo de soja
- 1.8 Clima adecuado para la soja
- 1.9 Condiciones de riego
- 1.10 Siembra de la planta
- 1.11 Rotación de cultivos con soja
- 1.12 Usos de la soja
Características, usos y cuidados de la planta
¿Qué es la soja y para qué se utiliza?
La soja o soya (Glycine max) es una legumbre de la familia de las papilionáceas, a la que pertenecen plantas tan conocidas como la alubia o el guisante. Actualmente es uno de los cultivos mundiales más importantes, debido a su gran contenido en proteínas, aceite, y a su rendimiento.
La producción de soja en el mundo se destina principalmente a la elaboración de piensos para animales y, en menor proporción, para la obtención de soja y sus derivados para consumo humano.
Soja en un jardín casero. Sin haberle proporcionado grandes cuidados (más que un suelo fértil y riego frecuente), su rendimiento ha sido excepcional.
Descripción de la planta de la soja
La soja actual procede de la especie Glycine ussuriensis, que crece silvestre en China y Japón.
Se trata de una planta anual de hasta 1,5 m de altura. Tallos erectos cubiertos de una espesa pilosidad de color amarronado.
Hojas alternas, trifoliadas con folíolos ovales y pedúnculos cortos; las basales, simples.
Flores blanquecinas o blanco – violeta de 5-6 cm de longitud agrupadas en racimos.
Los frutos son legumbres de hasta 7 cm de longitud con una o cuatro semillas en su interior. Estas presentan diferentes colores según de la variedad que se trate (principalmente amarillas, negras o verdes).
Origen de la soja
La soja tiene su origen en en el sudeste asiático. Tenemos restos de su su existencia en China hace ya más de 5000 años y su uso como alimento aparece documentado en este país en el año 2800 A.C.
Ilustración de un brote de la planta, flor y frutos (vainas) de soja
Dado que las religiones orientales prohibieron el consumo de carne animal, la soja se impuso desde el principio como un cultivo imprescindible en Oriente para suministrar las proteínas que no podían adquirir de la carne.
De hecho, en estas regiones se la conoce como » carne de los campos » o » ternera de la China», dado que, en muchas ocasiones se utiliza como sustituto de la carne.
A partir de allí fue llevada a a Europa en el siglo XVIII y a Estados Unidos a principios del siglo XIX. Es en este país donde su cultivo adquirió una mayor importancia dentro de los países occidentales hasta convertirse en el primer país productor del mundo y un gran exportador a otros países que la necesitan.
Brasil es el segundo productor del mundo antes Argentina que supera a China e India. En Europa el mayor productor es Italia.
Variedades de soja
Existen muchas variedades cultivadas de soja, que se clasifican en 10 grupos, teniendo en cuenta la duración de su ciclo vital. Entre todas podíamos mencionar las siguientes:
Las semillas de soja amarillas son las que se cultivan para la elaboración de bebidas vegetales, harina de soja, y la mayoría de productos comestibles de soja para consumo humano.
- Amsoy
- Beeson
- Williams
- Cutler
- Kent
- Kingsoy
- Gallarda
Consejos para el cultivo de soja
Se recomienda cultivar soja ecológica y utilizar plaguicidas ecológicos para el cultivo. Para informarse, recomendamos acudir a la cooperativa o agrupación de agricultores de su región.
Actualmente, existe una enorme variedad de tipos de soja transgénica y plaguicidas asociados a estos cultivos. Este tipo de productos terminan por agotar el terreno y destruir el ecosistema, de modo que, en el futuro, ese terreno será infértil.
Los plaguicidas utilizados para la soja transgénica son muy agresivos para los ecosistemas y afecta a numerosos tipos de plantas y animales, muchos de los cuales son beneficiosos (por ejemplo polinizadores, protectores del suelo, insectos buenos, etc.). Además, algunos pueden contaminar aguas subterráneas, etc.
Según experiencias recopiladas, diversos agricultores coinciden en que la agricultura ecológica es rentable y tiene un buen rendimiento, a diferencia de los mitos que circulan en contra de ésta.
¿Cómo cultivar soja en casa, en el jardín o terreno?
La soja es una planta bastante fácil de cultivar. Requiere una exposición soleada, tolera muchos tipos de suelo, aunque prefiere aquellos arenosos, fértiles y con buen drenaje.
Incluso en suelos poco fértiles, la soja suele tener un rendimiento superior al de otras leguminosas de grano.
Vaina de soja seca en un cultivo. En el interior se encuentra la semilla, que es la parte comestible
Tipo de suelo para el cultivo de soja
- Se deben evitar terrenos demasiado compactados, que dificultan el enraizamiento.
- El pH del suelo debe ser ligeramente ácido. Reacción edáfica: tolera desde 4,3 a 8,4 (prefiere un rango de 6 – 6,5)
Clima adecuado para la soja
- Es una planta de climas subtropicales.
- Para zonas más septentrionales, se considera que la soja de semillas verdes es la que mejor se adapta. Este tipo de soja tiene un grano muy tierno y muy buen sabor.
- Sensible a las heladas y al calor extremo. No resiste bien el invierno.
- No le son favorables las condiciones de humedad elevadas.
Condiciones de riego
- Para una buena cosecha, el mínimo son 50 cm.
- Tolera precipitaciones anuales entre el rango de 31 a 410 cm.
Siembra de la planta
- La siembra en semillero a principios de primavera. También se puede sembrar directamente en terreno definitivo a finales de primavera, aunque en este caso, si el verano es muy caluroso no habrá buena producción.
- Previamente a la siembra, se recomienda remojar las semillas durante 12 horas en agua tibia.
- Normalmente la germinación se produce a las 2 semanas a una temperatura entre 12 – 16°C.
- Trasplantar en maceta o terreno definitivo cuando las plántulas sean suficientemente grandes para poder ser manipuladas.
Rotación de cultivos con soja
Como planta leguminosa, el cultivo de soja es beneficioso para el terreno ya que en sus raíces contiene bacterias fijadoras del suelo, que enriquecen el terreno con nitrógeno, de forma natural. Eso significa que al año siguiente, los cultivares que se siembren en ese terreno tendrán mejor rendimiento.
Al año siguiente, en el terreno donde se ha plantado soja se pueden cultivar hortalizas, como patatas, cebollas, berenjenas o pimientos (rotación de cultivos).
Cuando termina el cultivo de soja, conviene aprovechar las raíces, bien dejándolas en el terreno y limpiando sólo las partes aéreas de la planta, que suele ser lo más recomendable, o bien utilizándolas para compost.
Cuando se eliminan restos de plantas al final de la temporada de crecimiento, es mejor eliminar solo las partes aéreas de la planta, dejando que las raíces en el suelo se descompongan y liberen su nitrógeno.
Usos de la soja
La soja, junto con las patatas, el maíz y el mijo constituyen los alimentos básicos en China.
La soja se utilizó y se sigue utilizando en oriente como alimento, bien en su forma simple, como una legumbre más, o a través de alguno de sus derivados: tofu, leche de soja, miso, brotes de soja, salsa de soja, etc.
Todos estos productos y, especialmente los derivados de soja se están cada vez más extendiéndose por otras partes del mundo.
En Occidente, el uso de esta leguminosa se centra fundamentalmente en la producción de piensos para el ganado, en la elaboración de aceites comestibles, lubricantes industriales, en grasas vegetales tanto para la alimentación en forma de margarinas, como para la industria, pinturas u otros derivados industriales.
Propiedades de la soja
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29 junio, 2021
